Morcillo y Martínez enseñan los dientes en el inicio de la campaña rectoral

“La reacción de la universidad ante la noticia que un político [en referencia al exconsejero autonómico Manuel Cervera] había plagiado una tesis doctoral no ha sido suficiente”, acusó este jueves el aspirante a rector de la Universitat de València, Vicent Martínez (Valencia, 1962), tras formalizar su candidatura a las elecciones programadas para el 20 de enero. “Se debería haber constituido una comisión de investigación y si hay plagio actuar y retirar el título”, añadió. La acusación entraba en el capítulo de “recuperación de la dignidad de la institución” de su apenas esbozado programa electoral.

El actual rector, que formalizó su candidatura una hora y media después, consideró desagradables e injustificadas las referencias a la dignidad universitaria y tildó de “simplista” el ejemplo de la mencionada tesis. “Si se presenta una denuncia, que no dude nadie que la Universitat de Vàlencia abrirá expediente y se depurarán responsabilidades”, aseguró el catedrático de Farmacología Esteban Morcillo (Valencia, 1951) tras cifrar en 350 las tesis que se leen al año en esta universidad.

En las comparecencias subsiguientes al acto puramente formal de la inscripción electoral, ambos candidatos recalcaron que se consideraban “amigos”. Pero, para ser el primer día, enseñaron los dientes algo más de lo que una amistad sugiere. Y marcaron nítidas diferencias de estilo. El arranque del calendario electoral sugiere una campaña más caliente de lo esperado, aunque los equipos y los programas no se presentarán hasta el día 24 de enero. Es una situación inédita, puesto que en la historia reciente de la universidad las elecciones para un segundo mandato han sido siempre a un solo candidato.

Morcillo puso también en dura la “voluntad de colaboración” de Martínez, a quien depuso meses atrás como director del Observatorio Astronómico. Sugirió que debería haber presentado su candidatura al Claustro, como hacen quienes “de verdad” quieren “contribuir con sus ideas” al debate y la vida universitaria. El rector se puso como ejemplo a sí mismo, que fue el claustral más votado en su facultad y a los tres candidatos que se enfrentaron a él en las anteriores elecciones (Maria Antonia García-Benau, Vicent Soler y Antoni Furió), ya que todos tienen la condición de claustrales. En un artículo publicado ayer en El Mundo, García-Benau, que disputó la segunda vuelta con Morcillo en 2010 y ha renunciado a presentarse ahora, pedía al actual rector que construyera “una gran coalición”.

El aspirante asocia el plagio de una tesis a déficit de dignidad en la institución

El catedrático de Astronomía, que acudió en solitario a la secretaría de la universidad, dio una pista sobre su equipo, “que será más para gobernar que para ganar”. Su equipo solo tendrá cuatro o cinco vicerrectores, para que “el coste de la gestión sea menor”. Morcillo, que llegó acompañado por varios vicerrectores y colaboradores, lo consideró una “muestra de simplicidad”. “Cinco vicerrectores no gestionan mejor que 12”, dijo, y añadió: “No necesitamos que nos enseñen lo que es austeridad”, en referencia a los cuatro años de rectorado que ahora culminan.

El exdirector del Observatorio Astronómico aseguró que si alguien hubiera tomado la iniciativa de presentarse, él se hubiera retirado. Su ambición vino a decir, no es ser rector, sino “cambiar el rumbo de la nave”, en alusión al edificio histórico de La Nau, donde nació la Universitat de València. Este será, tal vez, su eslogan.

El catedrático de Farmacología respondió con la necesidad de “una mezcla correcta de continuidad y cambio” para la institución que preside e hizo valer la experiencia que le avala en la gestión. El aspirante abogó por aumentar la presencia social de la institución y “a lo mejor hay que salir a la calle”, aventuró, para responder a los ataques que recibe la universidad. El actual rector subrayó su voluntad de conseguir “integrar, cohesionar y unir” a la comunidad universitaria ante las amenazas externas.