La calidad como respuesta

Al mal tiempo, inventiva y esfuerzo, calidad y buena danza. El 22º Certamen de Coreografía de Danza Española y Flamenco se cerró este fin de semana con las galas de su palmarés en 2013, cinco obras entre solos y grupales de las que se puede decir que en ellas prima la calidad y un buen nivel de años que superó las expectativas y elevó el listón con respecto a ediciones anteriores. En el ambiente flotaba un ánimo de frustración: ¿qué pasará y dónde encontrarán vida laboral estos jóvenes talentos de la creación del baile? ¿Podrá realizarse el certamen en 2014 con los recortes por venir? Este concurso, tras deambular por varias sedes hasta recalar este año en el teatro del Cuartel del Conde Duque, ha demostrado con creces ser la cantera y primera ventana de exhibición de ya más de dos generaciones de artistas de la danza española y el ballet flamenco.

El premio a la bailarina sobresaliente lo obtuvo Estela Alonso con el solo A mi manera. El segundo lugar de conjunto fue para In time de Emilio serrano mientras el primero fue para el dúo De vieja usanza, ideado por Manuel Días, que bailó acompañado de Luisa Serrano. El primer premio de solo lo obtuvo José Maldonado con Mojácar y el segundo, Selene Muñoz con Alegría de papel; esta última obra también se llevó el premio a la mejor partitura original, ideada por Miguel Rodrigáñez, que tocó el contrabajo y participó activamente de la acción o performance.

Estela Alonso mostró su pericia en el baile de palillos y zapatilla con una intención muy retro en la estética y en la idea, no así los seis jóvenes pilotados por Emilio Serrano, con una apuesta futurista, arriesgada, de buen uso espacial y donde falla la imbricación musical y las transiciones. El trabajo In time demuestra que actualmente los bailarines de danza española salen muy preparados de los conservatorios y buscan un horizonte teatral más ligado a las expresiones contemporáneas.

Por su parte, Manuel Díaz también miró al pasado y a los guiños del baile en pareja de antaño, usando con acierto la música de Turina y muy preocupado por la plasticidad.

El jurado estuvo compuesto entre otros por Eva López Crevillén (profesora de análisis de repertorio del Conservatorio Superior María de Ávila), Sandrine Rabassa (directora artística del Festival Flamenco de Mont de Marsan) y el bailarín y coreógrafo Manuel Liñán. La crisis ha obligado a la organización de este certamen a concentrar el número de premios y a dar otros incentivos nuevos, como0 el de la Fundación AISGE y el premio Flamenco Vivo (Carlota Santana, Nueva York), consistente en ir a montar una coreografía a esa ciudad en 2014.