Abel Caballero cambia al BNG por el PP para sacar adelante dos nuevos impuestos

El regreso del verano ha traído un cambio de estrategia del Partido Popular de Vigo, que se desangraba desde que el alcalde, el socialista Abel Caballero, comenzó a enarbolar la bandera de Peinador. Primero fue la renuncia de los populares a mantener el veto a las ayudas municipales al aeropuerto vigués, de difícil justificación ante los vigueses cuando el mismo partido las promueve en A Coruña o desde la Xunta a Lavacolla. Y en cuestión de unos pocos días, el partido que lidera en Vigo José Manuel Figueroa ha dado su visto bueno a un programa de becas en inglés del que Caballero ha hecho bandera y apoyado, hoy mismo, el esquema básico de tasas e impuestos para los Presupuestos de 2014. En el pleno de esta mañana, los populares han facilitado con su voto la modificación de dos ordenanzas fiscales para cobrar tasas a las empresas de comunicaciones y servicios que tienden sus infraestructuras en la ciudad. Se trata de una partida 775.000 euros que compensará en parte la decisión del PSOE, que gobierna en minoría, de congelar tasas e impuestos, una medida que la oposición tacha de populista, pero que no está decidida a tumbar. PP y Bloque reclaman, eso sí, que las ordenanzas fiscales se debatan en el pleno para introducir matices, cuando los socialistas quieren precisamente ahorrarse ese trámite presupuestario.

Caballero ha atisbado en el cambio de estrategia del PP una nueva política de alianzas para su gobierno en minoría, aunque el precio que deberá pagar es la indignación de sus socios naturales del BNG. Los nacionalistas se han abstenido hoy en el debate sobre los dos nuevos impuestos, aunque su portavoz, Iolanda Veloso, ha cargado las tintas contra la determinación del gobierno local de prorrogar el capítulo de ingresos del Presupuesto pese a existir un mandato plenario, impulsado por PP y BNG, para que se debata el conjunto de las ordenanzas fiscales. Los populares explicaron su apoyo a las nuevas tasas, adelantado este lunes, como “un gesto favorable” para generar un gran debate sobre los impuestos.

Pero las concesiones que el grupo socialista está dispuesto a hacer al PP son mínimas. En el pleno de hoy, el PSOE ha dejado claro que no piensa convocar ese pleno que le reclama la oposición, al asegurar que “sí hay debate” sobre ordenanzas fiscales y retar a PP y BNG a que “se retraten” sobre la congelación propuesta. Según recordó la concejal de Facenda, Raquel Díaz, las ordenanzas que están en vigor ya fueron debatidas y aprobadas por el pleno en su día. “Lo que pasa es que no quieren debatir porque se han quedado sorprendidos con nuestra propuesta”, acusó Díaz. La edil socialista ha defendido la política fiscal del gobierno local, que le ha llevado a ser “la ciudad menos endeudada de España” y a apoyar a los ciudadanos con menos recursos. Raquel Díaz recordó que el gobierno de Abel Caballero calificó de “histórica” la congelación de impuestos, que contrapuso con las alzas y copagos aplicados desde la Xunta y el Gobierno central. Según cálculos de la Federación Española de Municipios e Provincias citados por la edil, las entregas a cuenta el año próximo se reducirán un 3,5%, lo que supondrá una merma de ingresos para Vigo de 2,5 millones de euros.

Pese al apoyo del PP a los dos nuevos impuestos, que recaerán sobre operadoras de telefonía, agua, luz y cable, la tensión entre populares y socialistas no se ha relajado. Concluido el pleno, José Manuel Figueroa insistió con la exigencia del pleno extraordinario para debatir tasas e impuestos públicos de 2014, y anunció que si Caballero no toma la iniciativa, su grupo hará uso de su capacidad para promoverlo. Figueroa, que atribuyó a la gestión de gobiernos locales del PP el endeudamiento relativamente bajo del Ayuntamiento vigués, justificó el apoyo a las dos nuevas ordenanzas porque “son interesantes para las arcas municipales”, pero dio de plazo al alcalde hasta las 12,00 horas del lunes para convocar el pleno que demanda. La respuesta de Abel Caballero no se hizo esperar. El alcalde tachó a Figueroa y a los ediles del PP de “farsantes” por pedir un debate para rebajar impuestos cuando ese partido “los sube de forma desmesurada” en las Administraciones en las que gobierna, acusó. “Pero aquí vienen con otra carita”, ironizó. El regidor avanzó que respetará el reglamento y convocará el pleno que reclama el PP si este grupo municipal lo impulsa, pero advirtió que el único órgano competente para hacer propuestas como las ordenanzas fiscales es el gobierno local.