El número de turistas crece pero la rentabilidad para el sector es mínima

Este verano ha dejado las calles llenas de turistas, en su mayoría extranjeros, pero las cajas de los negocios se han quedado medio vacías, según los datos de la temporada 2013 presentados ayer por la Confederación Empresarial Valenciana. El gasto turístico ha crecido un 1,4% pero el visitante que ha venido antepone el precio a la calidad, según los empresarios de la hostelería. El número de turistas no para de crecer pero la rentabilidad del sector es "prácticamente negativa" según el presidente de los hoteleros, Luis Martí, que advertía que así es difícil "crear empleo".

"La continua guerra por la bajada de precios junto a otros factores como la subida de impuestos, el aumento de los costes y la reducción de las ventas, está llevando al sector a unos límites de bajada de rentabilidad que resultan insostenibles para muchas empresas", explicaba Manuel Espinar, presidente de la patronal hostelera de la Comunidad Valenciana.

El 60% de la demanda turística de la Comunidad Valenciana este verano ha sido internacional. Los turistas japoneses y rusos son los que, porcentualmente, más han incrementado su presencia. Pero aunque suba la demanda internacional, la ocupación hotelera no ha crecido mucho respecto a 2012 (un 1,45% más) por la reducción del turismo nacional (un 2,77% menor), según la encuesta de ocupación hotelera.

La rentabilidad del sector es "prácticamente negativa" según la Federación Hotelera

El gasto turístico ha crecido un 1,4% pero, según los empresarios de la hostelería, los márgenes de beneficio se han visto reducidos a su mínima expresión. "La bajada de precios lo que hace es activar el consumo en un nicho de mercado que solamente se mueve por el precio y no valora el producto", decía Manuel Espinar.

"Aunque en algunos sectores se pueda pensar que se está creciendo, no vamos a generar empleo", explicaba Teresa Altarejos, presidenta de los empresarios de agencias de viajes.

Las agencias han visto crecer la demanda de "último minuto" animados por precios más bajos. La flexibilidad y escasa previsión de este tipo de turista, según Altarejos, ha dificultado la planificación: "Esta nueva forma de viajar acabará siendo estructural y no nos deja tiempo para trabajar la solicitud del cliente".

Altarejos explicó que el año pasado la llegada de cruceristas al puerto de Valencia creció más de un 20%. "En 2013, se ha estabilizado y en lugar de generar un pico estacional se está escalonando a lo largo de 10 meses, lo cual es positivo", añadía.

Preguntados por la política de grandes eventos y por la pérdida de la fórmula 1, el presidente de la Federación Hotelera hacía balance: "Desde el punto de vista empresarial, la fórmula 1 es un evento rentable, siempre que la inversión, y el coste que implique el canon y todo lo que conlleva el evento, sea razonable. El problema del sector es que no conocemos el coste y por lo tanto es muy difícil decir que sí a toda costa". "Más que pesimistas somos realistas", añadía Martí, cuyo sector recibió críticas durante la celebración del campeonato en 2011 por tener los precios más altos del mundial.

"No debemos aspirar a tener más turistas, ese es el objetivo de los destinos emergentes en países en desarrollo, sino a que sepan valorar la calidad", explicaba Manuel Espinar. El presidente de los hosteleros aboga por políticas que atraigan demanda que valore las ciudades y la cultura: "Necesitamos un pacto turístico que permita atraer y retener talento joven en la hostelería y turismo, captando a profesionales para satisfacer una demanda más fiel y prescriptora".