Benicàssim empieza a recibir a miles de ‘fibers’
Las puertas del recinto se abren el jueves, pero muchos asistentes ya han llegado a la localidad
La decimonovena edición del Festival Internacional de Benicàssim (FIB), la más difícil de los últimos años, comienza a ser una realidad con la llegada de los primeros fibers al recinto de festivales. A las nueve de la mañana, hora de la apertura de puertas, cientos de jóvenes, básicamente británicos, hacían cola este lunes para recoger las pulseras que dan acceso a cuatro días de música. En esta ocasión no ha habido riada y los adictos al FIB han ido llegando a cuenta gotas.
“El año pasado a estas horas la cola era inmensa”, aseguró un agente de seguridad en plena hora punta. No obstante, desde la organización aseguran que, hasta las 19.00 horas del lunes, llegaron a Benicàssim 5.500 personas. “El día lo podremos cerrar con más de 6.000 seguramente”, señaló Gustavo Navedo desde el departamento de comunicación de Maraword, la empresa organizadora del evento.
Las dificultades económicas que está atravesando el festival, las dudas sobre su continuidad y la baja expectativa de visitantes hacen de esta cita una de las más trascendentales de los últimos años. Su director, Vince Power, aseguró en la presentación que habrá una vigésima edición. Los impagos con los proveedores hicieron peligrar la presente edición. “El montaje estará totalmente acabado para el jueves”, manifestó Navedo. Las cifras de llegada de fibers de este lunes son similares a las de 2012.
En los próximos días se prevé que lleguen a Benicàssim cerca de 30.000 personas. La cifra es menor que los 40.000 del pasado año. Desde el sector de hostelería, llevan años notando el descenso de beneficios de un festival que, pese a todo, supone para muchos salvar la temporada.
“De momento hemos notado poca incidencia, esperemos que en los próximos días llegue más gente, pero la tendencia de los últimos años es a la baja”, asegura el presidente de la asociación de hosteleros de Benicàssim, Luis Bas. El dispositivo de seguridad lo compone más de un millar personas entre agentes de la Guardia Civil, policías locales (300), Policía Nacional, Bomberos, Cruz Roja y voluntarios.
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