Protesta ante la Audiencia de Alicante para pedir el tercer grado para un preso

Familiares y amigos de Fernando Enrique Muñoz, que lleva un año y medio en cárcel por dos robos que asegura que no cometió, se han concentrado este viernes ante la puerta de la Audiencia de Alicante exigiendo el tercer grado, la revisión de la pena y la libertad del condenado a diez años de cárcel.

Su padre ha anunciado que iniciará a partir del próximo 8 de julio una huelga de hambre para que concedan el tercer grado penitenciario a su hijo, que está a punto de cumplir los 20 meses en prisión, tras ser condenado por una serie de robos cometidos en vehículos, después de que su móvil, cuya pérdida denunció ante su compañía varios días antes de los asaltos, fuese localizado entre los efectos sustraídos que habían sido intervenidos a los ladrones.

Así, ha explicado que "aunque parezca increíble", su hijo perdió su teléfono el 19 de febrero de 2010, por lo que ese mismo día llamaron a la compañía para bloquearlo y darlo de baja. Dos días después, se sucedieron una serie de robos en la carretera que une las localidades alicantinas de Elda y Petrer, donde siete automóviles fueron asaltados mientras circulaban por la vía.

Según el relato del abogado publicado en un portal de Internet en el que se ha iniciado una recogida de firmas en defensa del hijo, los autores de los hechos colisionaban contra otros coches en la carretera para "simular accidentes", con el objetivo de, "en medio de la confusión, asaltar y hacerse con las pertenencias de los ocupantes".

El terminal del joven fue encontrado entre parte de los objetos robados, dentro de uno de los turismos asaltados, por lo que, según el padre, "le culpan de los robos, cuando el móvil estaba dado de baja dos días antes, inexplicable pero así es".

Sin antecedentes

Igualmente, ha asegurado que su hijo "no tiene antecedentes", y ha mostrado un documento de la compañía telefónica en el que se certifica el bloqueo del teléfono. "El 21 de febrero nos llama la policía de Elda para que vayamos a recogerlo. Nos preguntan si se lo han robado, y decimos que lo ha perdido. Tres semanas después lo detienen como autor de los robos. Esa es la película, aunque sea increíble", ha manifestado.

A la vista de la situación, ha insistido en que su objetivo es que le concedan el tercer grado, una decisión que, tal y como ha concretado, "depende del director de la cárcel" de Villena (Alicante), del juez de vigilancia y del fiscal que corresponda. "Los tres están dando largas, llevo cuatro meses esperando la solución y no la tengo, no voy a esperar más", ha subrayado.

El padre ha afirmado que tanto él como su hijo harán la huelga de hambre. "Él también quiere hacerla, estoy intentando por todos los medios que no la haga, pero ya no tengo fuerza moral para conseguirlo, porque ya lleva 20 meses preso, que me parece una salvajada", ha recalcado.