El expediente a Helga Schmidt por acoso laboral se cerró con acuerdo extrajudicial

La consejera de Cultura, María José Catalá, ha desvelado hoy que el expediente abierto por la Inspección de Trabajo a la intendente del Palau de les Arts, Helga Schmidt, por acoso a tres empleadas se cerró con un acuerdo extrajudicial entre las partes.

Catalá se ha pronunciado así en el pleno de las Cortes valencianas, donde el diputado socialista Juan Soto ha preguntado si se han adoptado medidas tras la denuncia de una secretaria de Helga Schmidt, ratificada por tres personas que ocuparon el mismo cargo, por acoso psicológico y abuso de poder, que dio lugar a un acta de infracción.

La consejera ha resaltado que esos hechos ocurrieron en 2012, y ha señalado que toda acta por infracción de Trabajo viene sucedida por la apertura de un plazo de alegaciones por la empresa, tras lo que se hace una resolución por la Dirección General de Trabajo.

Sin embargo, en este caso ha explicado que la Dirección General de Trabajo estimó las alegaciones presentadas por el Palau de les Arts al acta de infracción, porque se produjo un acuerdo extrajudicial "por el que la denunciante hizo manifestaciones en descargo de la actitud de la intendente".

Soto, quien ha explicado que una de las denunciantes seguía el debate desde la tribuna de las Cortes, le ha preguntado si está "del lado de las víctimas" o de "quien acosa", y ha defendido que el acoso "es incompatible" con la cultura y con "la dignidad humana más elemental".

El socialista ha reclamado "tolerancia cero" con el acoso y ha considerado que Schmidt no puede continuar "ni un segundo más" en su puesto de trabajo como intendente, "por muy genial que sea", porque debe prevalecer "el derecho a la dignidad".

Para Soto, las habilidades o la "supuesta genialidad artística" de Schmidt no pueden servir para mantener en su puesto de trabajo "a quien ha hecho mucho daño durante mucho tiempo a mucha gente".

La consejera ha replicado que está "del lado de la justicia", de la verdad, de las trabajadoras y de las personas, pero en este caso existe un acuerdo extrajudicial entre las partes que es "totalmente lícito" y que respeta.

Ha insistido en que el 10 de octubre de 2012 se presentó escrito ante Trabajo por la responsable de la empresa, que acompañaba un acuerdo extrajudicial mediante el que la denunciante hizo manifestaciones en descargo de la actitud de la intendente del Palau de les Arts y renunció a cualquier acción judicial.

Asimismo, ha añadido que en dicho acuerdo Schmidt ofreció disculpas por dicha actitud, que pudo interpretarse como "trato vejatorio o desconsideración para con los trabajadores".

Finalmente, ha explicado, ambas partes expresaban en su escrito conjunto que aceptaban las disculpas ofrecidas en el documento, se daban por satisfechas en lo personal sin tener que reclamarse nada por concepto alguno, desistían de procedimientos judiciales iniciados y renunciaban a cualquier reclamación futura.

"Yo siempre del lado de los trabajadores, pero también de la justicia", ha concluido Catalá, quien ha considerado que si los socialistas no están del lado de la justicia tienen "un problema".