La insaciable Laia Sanz

Ganar dos medallas de oro en dos comparecencias en un mes, además de ir y volver a Portugal —allí intentará triunfar en el Mundial de Enduro—, parece poca cosa para Laia Sanz, campeona del mundo de enduro y trial y vencedora en el Dakar femenino. La piloto catalana le echó ayer picante después de caer en la primera curva y remontar desde la cola. “Ha sido increíble ganar delante de mi gente y después de haberme levantado a las seis de la mañana para coger un avión y competir con una moto que no había probado”, declaró Sanz, que ya entró en la historia de los X Games en Foz do Iguazú (Brasil) cuando fue la primera debutante en triunfar. Tragó polvo durante dos vueltas en Barcelona para colocarse en cabeza con una superioridad insultante y finalizar por delante de Maria Forsberg y Sandra Gómez en la categoría Enduro X femenino. El viento arreció en el Estadi Olímpic de Montjuïc y obligó a suspender la final de Freestyle de Moto X mientras el skater Sean Malto se ganaba a los aficionados de la Anilla Olímpica que abrigaron la final de la Street League cuando se enfundó una zamarra azulgrana.