Dos ladrones asaltan y amenazan con un arma a dos jubilados en Santa Cristina
Los atracadores le rompieron una costilla al dueño de la casa y le hirieron en la cara

La policía busca a dos hombres que le dieron un buen susto, más de un golpe y amenazaron con una pistola a un matrimonio de jubilados, de 70 y 66 años. La pareja, de origen británico, se encontraba en su casa la noche del lunes, en la urbanización Golf Costa Brava, en Santa Cristina d’Aro (Baix Empordà). El marido había salido al jardín, sobre las diez de la noche, a fumarse un cigarro, cuando dos hombres salieron de entre los matorrales del jardín en los que se escondían. Le amenazaron con el arma y le hicieron entrar en la casa, donde le ataron y le preguntaron por la caja fuerte, que el matrimonio no tenía.
Los ladrones atemorizaron después a la mujer, poniéndole la pistola en la sien. “Dos veces me pusieron el revólver en la cabeza y dos veces sentí el clic”, explicó la mujer al Punt Avui, simulando una ruleta rusa. Aunque los Mossos aseguran que en ningún momento hubo disparos. Los ladrones además hirieron al hombre, de 70 años, que presentaba una contusión leve en la cara, y una costilla rota, según fuentes policiales. Como no encontraron ninguna caja fuerte, la mujer relató que los ladrones optaron por llevarse todos los objetos de valor que encontraron en la casa y unos 500 euros en efectivos que la pareja tenía para los gastos.
El atraco ocurrió a las diez de la noche, pero las víctimas no pudieron acudir a una comisaría hasta las doce. Tardaron dos en conseguir desatarse y salir de su casa. Y lo hicieron a mordiscos, usando los dientes para liberarse, según contó la mujer.
El incremento de los asaltos en Girona (de un 86% en 2012 respecto al año anterior) en los últimos meses llevó a los Mossos d’Esquadra a reforzar la vigilancia en la zona, donde la preocupación es evidente. También en Santa Cristina d’Aro, unos ladrones apalearon a una mujer de 68 años en febrero y le fracturaron la tibia.
El peor caso ocurrió en Platja d’Aro, en noviembre de 2011. Tres encapuchados irrumpieron en el domicilio del que era presidente de la patronal de Girona, Jordi Comas, mientras este veía la televisión. Los ladrones le asfixiaron hasta matarle. La policía catalana aún no ha logrado atraparles.
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