“Pedagogía en Andalucía y no en Flandes”

Pere Navarro reclamó ayer a Artur Mas que no repita la actuación que tuvo con Mariano Rajoy a cuenta de la negociación del pacto fiscal y que se emplee a fondo para lograr un acuerdo con el Gobierno español que haga posible la celebración de la consulta en Cataluña. “No queremos una negociación de dos horas, queremos un esfuerzo sin precedentes por su parte y por parte de todos los que votaremos la propuesta del PSC”, dijo.

La falta de acuerdo sobre el pacto fiscal llevó a Mas a disolver el Parlamento de manera anticipada y a convocar elecciones el pasado noviembre, en las que solicitó “una mayoría excepcional” tras la masiva manifestación del 11 de septiembre. El resultado de las urnas le supuso un serio correctivo y de los 62 diputados que tenía CiU se quedó con 50. El líder del PSC vino a decir ayer a Mas que aprenda de sus errores y que administre bien “toda la fuerza que le dan los más de cien diputados para hablar no solo con el presidente del Gobierno, sino con todos y cada uno de los partidos estatales y los presidentes autonómicos”. Y no solo eso, sino con todos los expresidentes catalanes y españoles, con la intención de “hacer de presidente con mayúsculas”. Si es así, el PSC estará del lado de Mas. “Con los deberes que usted le ha puesto al presidente de la Generalitat, tendrá la agenda llena hasta el año 2015”, espetó con ironía a Navarro el diputado de la CUP Joaquim Arrufat.

Tras las buenas palabras, vinieron los reproches. Navarro, dijo que le parecía “un poco extraño” que la cámara catalana vote que lo primero que tiene que hacer el presidente de la Generalitat es pactar con el Gobierno de Mariano Rajoy y, por el contrario, aquel centre sus esfuerzos políticos en explicar el proceso soberanista fuera de España. Por eso, se preguntó qué ayudaría más al camino que se abre en cataluña, “si hacer pedagogía con el presidente de Andalucía, por ejemplo, o con el de Flandes”.

La convocatoria de la consulta en 2014 coincidirá con el 300 aniversario de la Guerra de Sucesión, que comportó la pérdida de los derechos políticos que tenía Cataluña.

La tesis nunca verbalizada del presidente de la Generalitat es que “España no nos entiende” y que no permitirá el referéndum pactado que se ha celebrado en Quebec o el que tendrá lugar en Escocia el próximo año. De ahí la intención de aprobar una ley catalana que dé amparo a la consulta, así como “internacionalizar” el proceso y explicarlo en la Unión Europea, como ya ha hecho Artur Mas en Amsterdam y Bruselas. La convocatoria de la consulta en 2014 coincidirá, además, con el 300 aniversario de la Guerra de Sucesión española que comportó la pérdida de los derechos políticos que tenía Cataluña.

Para hacer posible la internacionalización, el pacto de Gobierno entre CiU y ERC ya recoge la intención de buscar apoyos al proceso soberanista catalán en la Unión Europea, aprovechando el debate político que se generará a cuenta del referéndum escocés. Fruto de ese mismo pacto, la Generalitat creó el Consejo para la Transición Nacional con esa finalidad de difundir las aspiraciones secesionistas.

“No nos hagamos trampas, señor presidente”, insistió Pere Navarro a Mas. “Si cree realmente en aquello que hoy votará, cambie sus prioridades y trabaje día y noche en la búsqueda del acuerdo con el Gobierno de España. Ese es el camino correcto”. No será “corto ni sencillo”, dijo el líder del PSC, pero se atrevió a decir que es posible “si lo hacemos bien”.