El Gobierno central inicia el dragado de los lodos contaminados de Flix
Los alcaldes dicen que el suministro alternativo de agua no está asegurado La Adminitración central sostiene que se han adoptado todas las “garantías”
Tras años de retrasos y de previsiones incumplidas el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente tiene la intención de iniciar hoy el dragado de los lodos contaminados del embalse de Flix (Ribera d'Ebre). En el lecho del pantano se acumulan 800.000 toneladas de residuos tóxicos y radioactivos, vertidos a lo largo de más de un siglo de actividad industrial en el municipio. Las obras costarán 165 millones de euros y el plazo de ejecución de los trabajos se prolongará durante dos años y ocho meses, informó ayer el Ministerio de Agricultura.
El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, y el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, se desplazaron ayer por la mañana hasta Flix para visitar los trabajos preparatorios. Al acto también asistió el alcalde del municipio, Marc Mur (PSC), además de otros ediles de poblaciones de la comarca. “Al fin. Mucha gente estaba convencida de que el proyecto no vería la luz”, explicó Mur.
Los trabajos están financiados en un 70% por la Unión Europea a través del Fondo de Cohesión, por lo que la obra tendrá que estar finalizada antes de diciembre de 2015 para no perder esta subvención, según fuentes del Gobierno.
El encuentro entre Ramos y Vila sirvió para escenificar el fin de la pugna entre Gobierno central y Generalitat. Las dos Administraciones habían mantenido un enfrentamiento durante los últimos meses para fijar la fecha de inicio de los trabajos. El Ejecutivo catalán exigía al Ministerio de Agricultura no iniciar la descontaminación hasta no estar finalizadas todas las obras de restitución territorial, que afectan a los abastecimientos alternativos de agua de los municipios que beben del Ebro.
La Generalitat incluso había amenazado con denunciar al Gobierno. Sin embargo, el plazo marcado para no perder los fondos europeos ha sido básico para que ambos Ejecutivos aparquen las rencillas y se ponga manos a la obra. “Ya hay acuerdo de todas las Administraciones implicadas. Estamos en disposición de empezar a retirar los lodos. Esos lodos llevan décadas y ponen en riesgo el futuro del río Ebro”, aseguró Ramos desde la orilla del pantano.
Aguas abajo de Flix, el Ebro abastece a un millón de personas y riega más de 50.000 hectáreas de terrenos de cultivo. El consejero de Territorio y Sostenibilidad, también quiso cerrar el problema. “Solo puedo agradecer la comprensión de los alcaldes. Se podrían haber hecho muchas más actuaciones, pero las necesarias quedan garantizadas”, zanjó Vila.
Los ediles de poblaciones de la Ribera d'Ebre situadas río abajo del Ebro, sin embargo, desmintieron al consejero. El anuncio del inicio del dragado provocó la ira entre ellos porque, según denuncian, hasta seis municipios no tienen garantizado el abastecimiento alternativo de agua en caso de un episodio de contaminación durante las obras. El alcalde de Miravet, el independiente Toni Borrell, dijo que llevará el caso al fiscal de Medio Ambiente. Borrell aseguró que, hasta hace dos días, tenían el compromiso de la Generalitat de que no empezaría la extracción de los lodos hasta estar acabados los pozos, canalizaciones y depósitos alternativos prometidos. “Hay municipios a los que no pueden acceder ni las cubas. Trasladaré la información a los servicios jurídicos del Consejo Comarcal”, dijo Jordi Jardí (CiU), presidente del ente de la Ribera d'Ebre.
Los lodos contaminados, una vez extraídos, serán clasificados y sometidos al proceso de descontaminación adecuado a sus características, explicó el director del proyecto, Marc Pujols. Después, los residuos, ya clasificados, deshidratados y tratados, serán trasladados a un vertedero habilitado en una zona cercana, narró Pujols. Por la complejidad y magnitud de los fangos, Agricultura califica la obra de “referencia internacional”, porque se tratarán contaminantes de naturaleza diversa de forma conjunta y simultánea.
Ramos quiso dejar claro que se han adoptado todas “las garantías” de seguridad. En los casos más extremos, si se provocara un episodio de contaminación, el agua potable de Vinebre, Tivenys, Móra d'Ebre, Pinell de Brai, Ascó y Garcia, será suministrada con cubas durante unas horas.
El alcalde Flix reivindicó que la gran parte de la descontaminación corre a cargo de fondos públicos. “Los lodos contaminados precisamente no han caído del cielo. Quien originó la contaminación se quiere marchar. La sombra y la oscuridad amenazan el futuro de Flix”, denunció, haciendo referencia a la empresa Ercros, que pretende despedir al 75% de la plantilla (156 personas) que de la fábrica que tiene en el municipio.
Vila explicó que la Generalitat ha abierto en los últimos años tres expedientes a la compañía por contaminar los terrenos que ocupa en Flix. Los inicios de la factoría se remontan a 1897.
Durante toda la vista de obras, de la americana de Marc Mur colgó la pegatina Flix en lluita. El alcalde y los concejales iniciaron ayer un encierro en el Ayuntamiento para reclamar a Ercros la paralización del Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
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