La A-23 en Barracas se reabre tras quedar atrapados decenas de camiones y coches

Carreteras intransitables, camiones cruzados en la vía, municipios sin electricidad y niños sin clase. Es el rastro que ha dejado en Castellón la intensa nevada que comenzó en la madrugada del jueves y continuó durante toda la jornada. Y también por la noche, cuando quedaron atrapados en la carretera A-23 en el término de Barracas decenas de camiones y coches. La acumulación de nieve obligó a movilizar a la Unidad Militar de Emergencias (UME), Guardia Civil y Cruz Roja para desbloquear la vía.

El tráfico se ha reabierto en ambos sentidos, hacia Valencia y Teruel, al filo de las dos de la tarde. Más de 200 personas han trabajado en la zona para desbloquear la vía y atender a un centenar de camioneros que necesitaban comida y mantas en zonas de servicio habilitadas entre los polígonos de Segorbe y Viver.

La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Paula Sánchez de León, ha destacado en el puesto de mando avanzado de Segorbe "la rápida actuación de todos los organismos e instituciones para solventar en el menor tiempo posible las incidencias producidas como consecuencia de la nieve".

Además del atasco ya solventado en la A-23, nueve carreteras permanecían cortadas por la mañana y en una treintena era obligatorio el uso de cadenas, según la Dirección General de Tráfico (DGT).

La intensa nevada ha colapsado el interior de la provincia de Castellón, especialmente localidades como Vilafranca, que ha calificado la situación como de "emergencia" y que registra un espesor de nieve que llega al metro y medio en algunas zonas del municipio. El espectacular paisaje que se puede apreciar incluso desde Castellón ciudad también tiene su otra cara: el Consorcio Provincial de Bomberos ha registrado solo en el día de hoy más de 40 asistencias.

Así, el Ayuntamiento de Vilafranca ha pedido ayuda "urgente" al Consorcio Provincial de Bomberos para poder solucionar la situación de "colapso". El alcalde de la localidad, Óscar Tena, ha afirmado que hay "mucha gente que necesita ayuda", ya que, además de que todos los accesos al pueblo están cortados, ha habido cortes de electricidad durante toda la mañana. Igual que en Morella, donde las estufas eléctricas no han servido hoy para calentar los hogares y los establecimientos y comercios se las han arreglado como han podido para poder dar servicio.

La electricidad ha vuelto ya a Morella y algunos puntos de Vilafranca, pero todavía es muy complicada la situación en las carreteras. Todos los accesos a Vilafranca están cortados, aunque las brigadas municipales se esfuerzan desde primera hora en la población abriendo vías. El Consistorio se ha podido poner en contacto con todas las masías del término municipal y por el momento, están todos bien.

La pequeña localidad de Herbés está incomunicada totalmente, sin luz y sin teléfono, y los ganaderos incluso temen perder alguno de los ejemplares de vacuno que están a la intemperie y rodeados de hasta un metro de nieve. Un ganadero de Mas de Torremiró, en el término de Morella, Enrique Boix, ha asegurado que no recuerda "una nevada más grande que esta".

Esta mañana continuaba nevando en muchas localidades de Els Ports y el Alt Maestrat, aunque las previsiones meteorológicas son mejores de cara al fin de semana. En Morella, la situación esté "controlada" y han invitado a todos a contemplar esta "imagen única" de la población nevada durante el fin de semana. En Vistabella y Barracas la nieve ha alcanzado también el metro de espesor, y En la zona de la Tinena de Benifassà hasta el metro y medio.

Desde el Consorcio Provincial de Bomberos han vuelto a pedir a los ciudadanos que extremen la precaución. Hasta 144 personas con un total de 36 vehículos han trabajado sin descanso en estos dos días de temporal.

Entre los múltiples servicios prestados, los bomberos han tenido que asistir a cuatro camiones que se habían quedado atrapados en Cortes de Arenoso, y en Morella se ha tenido que abrir el acceso hacia la Todolella para que el transporte sanitario pudiera circular para atender a un paciente, igual que ha sucedido entre Montanejos y Cortes de Arenoso.

A primera hora de la tarde se continuaba limpiando todas las carreteras del interior de la provincia, con especial dificultad en la Tinena de Benifassà.

En litoral, el temporal ha remitido lo suficiente como para reabrir los puertos de Gandia y Valencia. Los bomberos han realizado más de 47 servicios por lluvias y viento en la provincia de Valencia, según ha informado el Consorcio Provincial de Bomberos y el Centro de Coordinación de Emergencias. Los bomberos han sido llamados para realizar achiques de agua, saneamientos de fachadas por caídas de cascotes, de persianas y han retirado árboles caídos a la calzada.

El temporal también ha mantenido cortado hasta última hora de la mañana el puerto de montaña de Penáguila (Alicante) y dificulta la circulación en varias carreteras de localidades del interior de la provincia, como Torremanzanas, Alcoy y Banyeres de Mariola.

Alumnos sin clase

Alrededor de 1.500 alumnos no han podido asistir este viernes a clase a causa del temporal de frío y nieve, ha informado la Consejería de Educación, Cultura y Deporte.

El mayor número de escolares afectados se ha registrado en la población alicantina de Banyeres, donde 1.100 alumnos no han tenido clase al suspenderse la actividad en un colegio público de Infantil y Primaria, un instituto de Educación Secundaria y un centro concertado.

Además, 321 niños de la provincia de Castellón no han podido acceder a sus centros de estudio debido a que no han funcionado la rutas de transporte. Ha sido el caso de Albocàsser, Atzeneta del Maestrat, Benassal, Forcall, Morella, Jérica, Viver, Montanejos, Vall d'Alba y Vilafranca, han detallado desde el departamento de Educación.

Por lo que se refiere a la demarcación de Valencia, también ha habido incidencias en el interior por no poder circular los autobuses escolares en Alcublas, Villar del Arzobispo, Aras de los Olmos, Ademuz, Benagéber, Fuenterrobles, Camporrobles y El Hontanar, lo que ha afectado a un centenar de estudiantes.