El Tram de Castellón arranca con 1,3 millones de déficit al año

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, inauguró ayer las obras de remodelación de la avenida del Mar de Castellón que incluye un nuevo tramo de la plataforma del Tram, la vía reservada para trolebuses que conectará la universidad con el Grao. El tramo, que va desde la zona Este hasta el distrito marítimo, ha contado con una inversión de 40,45 millones. A falta del bucle central (previsto en 8,2 millones), la consejería de Infraestructuras cifra en 71,15 millones todo el trazado. “Tenemos que apostar por infraestructuras que supongan un ahorro a los ciudadanos”, dijo Fabra durante el acto. El proyecto, sin embargo, nace con un déficit previsto en 1,3 millones anuales y un coste global de 15,71 millones en quince años para compensar a la operadora que se haga cargo del servicio.

La consejera de Infraestructuras, Isabel Bonig, manifestó ayer que el servicio podrá estar operativo a finales de 2013. Desde su departamento no concretaron cuando se van a publicar los pliegos para que una empresa privada se haga cargo de este servicio que nace deficitario.

Según el proyecto de la consejería, la empresa deberá comprar los vehículos con batería que tienen un coste aproximado de 850.000 euros cada uno frente a los 180.000 de un vehículo diésel. La concesionaria deberá comprar seis eléctricos y tres diésel. En total, 5,64 millones. Junto a esta fuerte inversión inicial, la operadora tendrá costes de personal de casi un millón de euros. Infraestructuras prevé que en el primer año de su puesta en marcha el Tram tenga un coste de 3,29 millones de euros y unos ingresos de 1,9 de cumplirse las previsiones de pasajeros. El déficit previsto, de 1,3 millones, se mantendrá en los primeros años.

La consejería ya ha planeado que “en caso de que el servicio resulte deficitario, la administración compensará al operador en una cantidad cuyo importe se fijará en el pliego de la concesión”. De momento, se ha establecido en 15,7 millones en quince años. El coste anual del servicio de esta línea que unirá la universidad con el Grao de Castellón contrasta con la de todo el servicio de autobuses urbanos de la capital, estimado en 4,8 millones anuales.

El proyecto deja en el aire la continuidad de algunas líneas del transporte urbano de Castellón cuando la línea de Tram entre en servicio y mantiene la incógnita de su paso por el parque Ribalta. Recientemente el Tribunal Superior de Justicia valenciano anuló el paso del trolebús por esta zona ya construida. Isabel Bonig aseguró ayer que “hasta que no haya sentencia firme, el Tram pasará por el Ribalta”.