El federalismo ausente

¡Ah, el viejo mitin socialista en Cornellà! Auditorio lleno, un mar de banderas rojas, suena la armónica country, empieza la función.

Abre pista la diputada Eva Granados, número siete de la lista. Ve Cataluña dividida en tres grupos. A saber: 1) los que van en coche, viven en un dúplex y acuden al club (no mayormente especificado, se supone que de golf o de tenis); 2) la gran mayoría que sufre los recortes; 3) “los invisibles”, gente que ha perdido todas las prestaciones sociales. Referencias al federalismo: 0. Sube al estrado Carme Chacón. Indumentaria country: tejanos, chaleco, botines. “¿La independencia tiene épica?”, se pregunta. “No”, se responde. Épica tiene la familia que sobrevive con 400 euros, los pacientes que pagan dos veces los medicamentos, las personas que esperan dos años para una operación de cadera. Referencias al federalismo: O.

Es el turno del alcalde del lugar, Antonio Balmón. Country, también: chaqueta de piel vuelta, tipo cowboy del Marlboro. Voz cavernosa, tipo cowboy del Marlboro que además bebe bourbon. Balmón quiere ser independiente. No se asusten. “Independiente de los frívolos, de los cínicos, de los mercados”. Ah, bueno. “Independiente de Berlín, no de Madrid”. Hombre, eso ya parece más complicado, pero en fin. Concluye poéticamente: “El día 25 levantaremos la persiana del socialismo en Cataluña”. Ojo con no pillarse los dedos. Referencias al federalismo: 1. Concretamente, a “la España federal”, aludida de pasada en un momento de aplausos.

Es, por fin, la vez de Pere Navarro. Se ha quitado la americana al estilo americano, pero la corbata le impide asumir un aspecto decididamente country. De su discurso retengo el concepto de revolución: “Revolución es ir a votar”. Ajajá. Referencias al federalismo: 2. Una para dibujar fugazmente un “Estado federal” en que Cataluña establezca “relaciones francas y leales con el resto de España”. La otra para situar al federalismo como “alternativa sensata” entre independentismo y centralismo. Eso es todo, amigos.