La reforma, ni adelante ni atrás

Si hay que hacer caso del portavoz del Consell, la reforma del Estatuto de Autonomía no irá adelante en el Congreso de los Diputados, pero tampoco se retirará. El vicepresidente de la Generalitat, José Ciscar, confirmó este jueves que el Consell estudia paralizar la tramitación actual de la reforma del Estatuto de Autonomía en el Congreso de los Diputados para presentar una nueva reforma que incluya la cláusula de blindaje de inversiones estatales, ya aprobada por las Cortes Valencianas, pero también una reducción del número de diputados de la Cámara autonómica que ha propuesto el jefe del Consell, Alberto Fabra. Sin embargo, Ciscar proclamó: “Ni se retira la reforma ni se renuncia a nada”.

El vicepresidente apeló a que “el Congreso no permite tramitar dos reformas de un mismo Estatuto” y a la necesidad de evitar dos convocatorias de referéndum para aprobar eventualmente dos reformas del Estatuto y retó a los socialistas, a Compromís y a Esquerra Unida a que digan “si están de acuerdo” con la reducción del número de parlamentarios de 99 a 79. Según Ciscar, “algunos tratan de enmascarar que no quieren reducir el número de diputados”.

La oposición cree, en cambio, que es el PP el que quiere enmascarar la retirada de una reforma que se redactó para presionar al socialista Rodríguez Zapatero pero ahora incomoda a Mariano Rajoy tomando como excusa una nueva modificación estatutaria.

Pese a que la reforma exigió una mayoría cualificada de las Cortes Valencianas, su retirada puede hacerse solo con la mayoría absoluta del PP. Ciscar no respondió si se buscará el consenso previo de todos los grupos o los populares actuarán unilateralmente y se excusó en que no conoce bien los mecanismos de tramitación para no entrar en detalles.

Eso sí, saltó ante la alusión de que se trate, al final, de una maniobra para hacer “chantaje” a la oposición y borrar la reforma de la agenda del Congreso al menos esta legislatura. “No he dicho en ningún momento que si no hay acuerdo en la otra reforma la primera no pueda seguir adelante”, exclamó.

La oposición coincide en que, si hay que hablar de modificar otra vez el Estatuto, se ponga sobre la mesa una reforma global.