El turismo nacional cae por vez primera desde el inicio de la crisis

Las vacaciones no son algo “irrenunciable” para los españoles como el sector turístico llegó a creer durante los primeros años de la crisis. El visitante nacional es la gran noticia este verano. El principal cliente del sector turístico sufre un claro descenso. “Es la primera vez en los cuatro años de crisis en que se nota una caída en verano de las reservas del turismo nacional”, defendió ayer Antoni Mayor, presidente de los hoteleros de Benidorm y Costa Blanca. Benidorm estima un descenso del 4% en las visitas de españoles en la segunda quincena de julio. En la primera parte del mes, el descenso fue del 7%.

También la Asociación Provincial de Hoteles y Alojamientos Turísticos de Alicante (APHA) remarca que el visitante español está “muy por debajo de lo que viene siendo habitual”. La ocupación en Alicante cayó un 4,45% en julio. “Estamos muy preocupados por dos motivos: por el mercado nacional y por el último trimestre del año, cuando se dependa del cliente de negocios (principalmente español) y el turismo vacacional no palie su caída”, aportó Luis Martí, presidente de la Federación Hotelera de la Comunidad Valenciana.

Con estos mimbres, el sector afronta el principal mes vacacional con previsiones contenidas, difíciles de hacer, por otro lado, ya que la tendencia a las reservas a última hora se extrema. En líneas generales, los hoteleros creen que agosto puede igualar, en el mejor de los casos, los datos de 2011, aunque la mayoría apunta a una caída de la ocupación. Mayor, por ejemplo, da por hecho que agosto será “más flojo” que el año pasado aunque también deja claro que “la temporada no será mala, al menos en Benidorm”. Los hoteleros de la ciudad de Alicante y su área metropolitana son menos optimistas y ayer estimaron un descenso de la ocupación del 6,5% sobre el año pasado. En Valencia, la ocupación fue similar en julio debido al buen comportamiento del mercado internacional.

Fuerte aumento del mercado británico

Los responsables de los distintos destinos turísticos de la Comunidad Valenciana coinciden también en destacar la vitalidad que tiene el cliente extranjero. Y entre todos, es el británico el que está demostrando un mayor empuje.

“El mercado británico continúa siendo el principal empuje del mantenimiento de los datos de ocupación hotelera, con un 36,7% de cuota de mercado y un crecimiento del 12% en número de pernoctaciones respecto a la segunda quincena de julio de 2011”, aseguraba ayer la patronal Hosbec. El dato no es baladí, ya que en Benidorm el 50,9% de clientes son españoles y el 49,1 son turistas extranjeros. En conjunto, la ocupación de Benidorm se situó en julio en el 89,9%, lo que supone un ligero descenso de tres décimas en comparación con los datos del año pasado.

En Valencia, la tendencia también apunta hacia la equiparación del peso de los turistas. Martí subrayó también ayer que en Valencia el mercado internacional “se está comportando muy bien”. Y detalla que los mejores mercados extranjeros este verano son los británicos, los italianos, los rusos y los turistas procedentes de los países bajos, principalmente.

En la ciudad de Alicante y su área de metropolitana, la patronal hotelera también destaca el buen comportamiento del mercado inglés, que “se ha mantenido e incluso ha incrementado sus pernoctas”. Alicante también destaca que el “mayor crecimiento” en este destino ha llegado del mercado escandinavo y se ha convertido ya en el segundo destino emisor extranjero en importancia. La otra cara de la moneda la están mostrando este año los turistas procedentes de Francia e Italia, que están rebajando “considerablemente” sus pernoctaciones en la ciudad de Alicante.

En Benidorm, mientras, el segundo mercado extranjero en importancia es Portugal, con el 3,8% del total de las pernoctaciones. La patronal hotelera, además, destacó ayer la inclusión en su estadística quincenal la evolución del mercado ruso, uno de los más codiciados por su creciente capacidad de gasto y uno de los que registra más vitalidad. El turismo ruso y del conjunto de los países del Este creció un 15% durante la segunda quincena del pasado julio en comparación con el mismo periodo del año anterior.

El turismo de Europa

Por otro lado, los mercados belga y holandés se mantienen en los mismos niveles de 2011 con un 3,2% y un 1,8% del mercado respectivamente.

Por categorías, los hoteles de Benidorm con más ocupación en la segunda quincena de julio fueron los de cuatro estrellas, con un 91,8%. Muy cerca de este dato se situaron los hoteles de dos estrellas, que lograron un nivel de ocupación del 91,7%. En tercer lugar, los establecimientos de tres estrellas situaron su ocupación media en el 89,3%.

Los empresarios hoteleros coinciden en destacar la incertidumbre que suponen las reservas de última hora, una tendencia que no ha dejado de acusarse durante los últimos años. Hosbec, por ejemplo, explicó en su análisis que “la venta de última hora y el comportamiento del mercado nacional será determinante para los resultados de la quincena más importante del año en cuanto a ocupación y rentabilidad”, en referencia al actual mes de agosto. Y la Federación Hotelera de la Comunidad Valenciana insistió en la dificultad de realizar una previsión que finalmente se cumpla cuando cada vez son más las reservas de última hora. Esta tendencia explicaría, según el sector, que el sector turístico no lograra tirar el mes pasado del mercado laboral como ocurre tradicionalmente en este mes de verano. La incertidumbre sobre la llegada de clientes limita la contratación de personal a lo indispensable, explican los empresarios. La baja rentabilidad también contribuye, aunque los datos de ocupación sean buenos, a frenar la creación de empleo en verano como sí venía ocurriendo en los últimos años.