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Una serie de animación valenciana conquista Estados Unidos

‘Clay Kids’ es una caricatura de la tecnología a través de las andanzas de siete adolescentes La primera temporada de 26 capítulos se empezará a emitir en TVE a partir del otoño

Flippy, uno de los personajes de Clay Kids.
Flippy, uno de los personajes de Clay Kids.

La serie de animación valenciana "Clay Kids", que caricaturiza las nuevas tecnologías a través de las historias cotidianas de un grupo de adolescentes, ha conquistado al mundo de la televisión al ser galardonada con el prestigioso premio estadounidense Silver Telly Award.

Su creador, Javier Tostado, ha explicado que este reconocimiento es un "empujón más" a un sueño que ha tardado mucho tiempo en hacerse realidad pero que, en estos momentos, ya perfila la producción de la primera temporada de 26 capítulos de 11 minutos de duración, que comenzarán a emitirse en Clan TVE el próximo otoño.

El mundo de los zombies, los extraterrestres, la magia, los monopatines o la música hip-hop; cualquier tema sirve de excusa para que los guionistas de "Clay Kids" retraten el día a día de siete estudiantes de instituto inmersos en su mundo particular de internet, redes sociales y dispositivos móviles.

"Cuando escribíamos las historias, nos dimos cuenta de que el mundo de los chavales de hoy en día tiene mucho que ver con internet y con los móviles y como trabajamos con muñecos y atrezzo que modelamos nosotros, es como hacer una especie de caricatura de las nuevas tecnologías", ha explicado Tostado.

"Motor" es un chico parapléjico con una habilidad especial para la informática y la tecnología y actúa como DJ de un grupo de hip-hop que lidera el gamberro de "Flippy".

Junto a ellos protagonizan la serie "Carol", una adolescente tozuda, maniática e inteligente; "Naomi", una chica de buena familia enganchada a los SMS; "Robbie", un fracasado escolar loco por los grafiti; la risueña e ingenua "Jessie", considerada un bicho raro y siempre pegada a su monopatín, y el entrañable "Albert", un friki  tímido y algo debilucho.

Un equipo multidisciplinar de más de 80 personas ha trabajado en la creación de las historias y la construcción de los muñecos que dan vida a los siete adolescentes, así como los decorados, el atrezzo, la animación, la música y la postproducción.

Albert, uno de los personajes de Clay Kids.
Albert, uno de los personajes de Clay Kids.

La creación de las historias es común a otras series, pero en la preproducción el equipo de la serie ha creado "todo el universo" de "Clay Kids" -muñecos, escenarios y atrezzo- en un taller.

"Los personajes son muñecos que construimos con estructuras de acero articuladas, recubiertos de espuma de látex, manos de silicona y cabeza de resina", ha explicado Tostado, para quien la "originalidad" de su serie no sólo la marca el que esté realizada con la técnica de animación de muñecos, "que no se utiliza mucho".

También la hace diferente, reivindica, "cómo esta contada" pues "utiliza un lenguaje y unos temas que tocan de cerca a los chavales y son dos componentes que permiten que la mayor parte del público pueda sentirse identificado".

"Clay Kids" es un nuevo ejemplo de la buena salud de la animación española, una parte del sector audiovisual que, según Tostado, "puede sobrevivir a los tiempos que corren y a cómo funcionan las cosas en España, porque sus clientes están en todo el mundo".

Coproducida por TVE y con el respaldo del Ministerio de Cultura, la serie está dirigida a chavales de entre 6 y 11 años de todo el mundo y se ha realizado totalmente en Valencia, con un presupuesto de 2,5 millones de euros.

La serie infantil valenciana quedó finalista en el certamen de producciones Mipcom Junior Licensing Challenger, que evalúa las posibilidades futuras en el mercado de producción, y participó en el festival de animación de Annecy, el principal escaparate para la industria.

Está prevista su emisión el próximo otoño en Portugal y Finlandia, donde ya han reclamado una segunda temporada, y su objetivo "es conseguir una buena serie y hacer muchas más temporadas".

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