Carlos Varela, el valor del fiscal

Desde la primavera de 2004, Carlos Varela está al frente de los fiscales de nuestro país y desde 2008, es el primero que desempeña el cargo de fiscal superior de Galicia. Carlos Varela confirma la tesis de que son las personas las que llenan de presencia y contenido las instituciones, hasta el extremo de encarnar en el imaginario mediático la actuación del ministerio público en Galicia en mucha mayor medida que el actual o pasado fiscal general del Estado.

Fue, en efecto, Varela quien puso bajo el foco el importante trabajo desarrollado por el ministerio público en defensa de los derechos de los ciudadanos y el que amplió su actuación a ámbitos esenciales para el bienestar de los gallegos. Colaboró eficazmente con el pasado y actual Gobierno gallego en la persecución de los delitos contra el patrimonio histórico y en la mejor protección de menores e incapacitados. Asimismo, impulsó con el exvicepresidente Anxo Quintana y los colegios profesionales compostelanos la mediación familiar, que se generalizó después a toda Galicia.

Carlos Varela impulsó un amplísimo estudio coordinado por su fiscalía y realizado por la Guardia Civil de Tráfico que constató el carácter intencional de la mayor parte de los incendios forestales que asolan este país, pero descartando la existencia significativa de organizaciones delictivas, lo que desautorizó las antiguas tesis del exconselleiro Romay Beccaria e, incluso, las que hoy defiende el presidente Alberto Núñez Feijóo.

Carlos Varela demuestra su sensibilidad social y jurídica al priorizar la preparación de una demanda colectiva, inédita en el Estado, que perseguirá la anulación, por vicios del consentimiento otorgado, de la mayor parte de los contratos para la adquisición de participaciones preferentes a la banca, que perseguirá la restitución de su dinero a decenas de miles de ahorradores gallegos.

El trabajo de Carlos Varela demuestra que el valor de las instituciones es directamente proporcional a sus esfuerzos por ocuparse de los problemas de la ciudadanía. Por ello, la Fiscalía Superior de Galicia se ha convertido en pieza esencial del engranaje institucional de esta nación atlántica, a pesar de constituir formalmente una delegación jerárquicamente subordinada a la Fiscalía General del Estado. Lo que acredita que existe capacidad de acción institucional eficaz para los que conocen su país, el derecho y las reglas de la comunicación y de la inteligencia emocional.

Carlos Varela ejerce su profesión preferentemente en gallego y, por ello, es sobranceiro referente en su trabajo a favor de la plena normalización de nuestra lengua nacional en el ámbito jurídico, trabajo compartido con otros bos e xenerosos, entre ellos el anterior jefe superior de Policía de Galicia, Luis García Mañá. Capaz, como Carlos Varela, de dar a su puesto institucional una dimensión gallega y de cooperación ciudadana inéditas entre sus predecesores.

Cuando Carlos Varela sube la escalera sabe bien adónde va. A seguir trabajando por los derechos de los ciudadanos, la inclusión social de los más desfavorecidos y la Galicia libre y próspera solo posible en el marco del Estado social y democrático de derecho.