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El Supremo ratifica la ilegalidad del complejo hotelero Atrium

El establecimiento tenía un exceso de edificabilidad de 53.000 metros cuadrados

El Tribunal Supremo ha ratificado la anulación del intento del Ayuntamiento de La Vila Joiosa de legalizar el complejo hotelero Atrium Beach, rebautizado como La Vila Resort. En 2003, tras dos accidentes laborales con tres muertos, trascendió que el complejo tenía un exceso de edificabilidad de 53.000 metros cuadrados.

En una sentencia votada por la sala de lo Contencioso Administrativo el 22 de mayo, el alto tribunal ratifica un fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana de julio de 2008 que anuló la decisión del pleno de La Vila, del 20 de octubre de 2005, por la que se aprobó un Plan de Reforma Interior y Mejora (PRIM) para el hotel. Este instrumento legalizó el exceso de edificabilidad del Atrium y sirvió de base para la concesión por parte del Gobierno local, entonces en manos del PP, de la licencia de obras en diciembre de 2006.

La promotora del Atrium presentó recurso de casación al Supremo el 21 de octubre de 2008. El alto tribunal lo ha desestimado, imponiendo a la empresa las costas. El Supremo recuerda, en términos muy duros contra el Ayuntamiento de La Vila, que el PRIM “persigue lograr una edificabilidad suficiente para legalizar la construcción ilegal; y para ello dota de un coeficiente de edificabilidad elevado el suelo dotacional privado, que se convierte en público, para transferir dicha edificabilidad a la construcción ilegal, quedando desplazado el interés general por el interés particular”. “El Ayuntamiento de Villajoyosa no ejercitó sus potestades con el objeto de satisfacer el interés público del municipio”, agrega.

Además de cuestionar que el plan de reforma fuera propuesto por el mismo infractor, la sentencia también se significa con dureza contra el mismo. “El complejo construido parte de una situación de falta de licencia, sin que sea posible la modificación o ampliación de la licencia original por haberse agotado la edificabilidad, tratándose de una cuestión de grave ilicitud, intensa y de una relevancia nada desdeñable”.

La propiedad del hotel afirma que tiene la licencia de obras en vigor y que la definitiva anulación del PRIM no afecta a la legalidad de lo realizado. El exedil de Iniciativa Independiente Pedro Lloret, que recurrió su tramitación, considera que “el instrumento de planeamiento que amparó la licencia ya no existe”, por lo que entiende que “la licencia podría ser anulada”. Lloret presentará otro contencioso para solicitar su nulidad.

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