Raúl Fernández seguirá al frente del PSdeG ourensano

El PSdG se queda como está en Ourense. Raúl Fernández, actual secretario provincial, fue reelegido ayer con el 73% de los votos en el II Congreso Provincial celebrado ayer, mientras que Pablo López Vidal, que lideraba la candidatura alternativa a la oficial, se quedó con solo el 25% de los apoyos. En Lugo, por su parte, no había lugar a sorpresas: solo se presentó la candidatura de José Ramón Gómez Besteiro, presidente de la Diputación Provincial, que fue elegido por aclamación y así toma el relevo del senador Ricardo Varela.

El resultado del congreso ourensano tampoco trastocó los pronósticos de los aparatos de los candidatos. López Vidal contaba con el apoyo mayoritario de los 11 delegados de la capital provincial, donde el alcalde y su principal valedor, Francisco Rodríguez, controla la militancia. Finalmente sumó un total de 23 votos procedentes de la propia ciudad y de localidades como Toén, Bande o Valdeorras.

El sector oficialista, que controla férreamente el aparato orgánico en la provincia, obtuvo el apoyo de 66 delegados, aunque podrían haber sido 71. En el recuento faltaron las papeletas de cinco de Xuventudes Socialistas que no ejercieron el voto a tiempo.

La aparente calma de la campaña precongresual se convirtió en un belicoso debate durante el análisis de gestión de los órganos provinciales, acto previo a la proclamación de las candidaturas. Posteriormente, durante su discurso, López Vidal reclamó un cambio en la directiva “porque no estamos bien y aspiramos a estar mejor”. También propuso cambiar el sistema de elección interno para que la dirección sea elegida mediante el voto de todos los militantes y no solo a través de los delegados. Con este sistema, López Vidal aglutinaría la mayoría de la agrupación de Ourense, la más numerosa, controlada por el alcalde, que mantiene abierto un agrio enfrentamiento con el líder gallego, Pachi Vázquez.

El análisis de gestión se convirtió en un belicoso debate en el congreso ourensano

Fernández afirmó que tras perder el gobierno de la Xunta, “frente a los oportunistas, solo quedamos los socialistas”. Pero López Vidal aseguró no sentirse aludido “porque le salieron los dientes de leche en el partido”.

En la clausura, Pachi Vázquez insistió en diferenciar el proceso congresual “democrático” de los socialistas y la “herencia de Baltar padre a Baltar hijo” en el PP ourensano. Aseguró que Núñez Feijóo “ha esmagado los derechos de los gallegos” en los últimos tres años, provocando “más paro, más recesión económica y menos derechos sociales”, y le pidió que enseñe a todos los gallegos “de una vez” los papeles del acuerdo firmado con Pemex.

Por la mañana abrió la cita la exministra de Sanidad y secretaria de Política Social del PSOE, Trinidad Jiménez. En su discurso cargó contra el Gobierno central y acusó a Núñez Feijóo de ser cómplice de la política de recortes.