Muere de forma violenta una mujer en Mataró, la segunda en cinco días

Dos mujeres de avanzada edad han aparecido muertas con signos de violencia en sus pisos de Mataró (Maresme) con solo cinco días de diferencia. En ambos casos, las fallecidas tenían 80 años y los vecinos avisaron a la policía. Hasta el momento no hay ningún indicio claro que permita a los Mossos d’Esquadra relacionar las dos muertes, según fuentes cercanas al caso; pero, a pesar de ello, no se ha podido evitar la preocupación ante dos casos con características similares, en la misma ciudad y en un intervalo de tiempo tan pequeño.

La primera víctima fue encontrada en su piso, en el pasaje de Enric Fité, el pasado jueves 17 de mayo. A las 13.15 horas los vecinos avisaron a la policía, que encontró a la mujer tumbada boca abajo. Presentaba un fuerte golpe en la cabeza. La policía no dio por hecho que se tratase de una muerte violenta. La herida era compatible también con una caída accidental. Pero tres días después el informe forense certificó que se trataba de un homicidio.

Cinco días más tarde, otros vecinos llamaban también a la policía. Ha pasado este martes, a las 14.45. Los agentes se encontraron a una mujer muerta, de nuevo de 80 años. La víctima presentaba signos de violencia, aunque los Mossos no han confirmado qué tipo concreto de heridas sufrió. La anciana vivía sola en su piso. La policía tampoco ha confirmado si falta algo del domicilio o si está revuelto.

“La preocupación existe, pero en estos momentos no se pueden establecer paralelismo, más allá de los lógicos del sentido común”, ha asegurado a este diario el alcalde de Mataró, Joan Mora (CiU). “Son pocos días, habrá que ver si hay algún patrón”, ha añadido, siempre manteniendo la prudencia ante un caso reciente, bajo investigación. Mora ha acudido al piso de la víctima tras ser informado de la muerte, para conocer de primera mano los detalles de lo ocurrido.

En Cataluña existe un precedente que vuelve involuntariamente a la memoria cuando se trata de homicidios de ancianos: Remedio Sánchez, conocida como Reme, acabó con la vida de tres mujeres mayores en 2006 y lo intentó con al menos cinco más. Se ganaba su confianza y luego, una vez en su casa, las asfixiaba o estrangulaba con diversas prendas para robarles. En noviembre de 2011, los Mossos detuvieron a una especie de aprendiz de Reme: Marcela S. La mujer robó con mucha violencia a tres ancianas en sus casas, en el Maresme (El Masnou, Sant Vicenç de Montalt y Premià de Mar). Para ganarse su confianza, usó a su hijo de ocho años, que la acompañó en los asaltos. Los Mossos temían que uno de esos robos acabase en un asesinato.

En los dos casos de Mataró, no hay hasta ahora ninguna pista que apunte a un mismo homicida.