Gran versión de Volondat de conciertos de Liszt
Su interpretación fue así un bello cotejo de dos conceptos concertísticos bien diferenciadas
Pierre-Alain Volondat, que en 1983 fue el primer concursante que copó todos los premios posibles del concurso Queen Elisabeth Competition, ha ofrecido, el viernes en el Palacio de la Ópera de A Coruña, una excelente versión de los Conciertos para piano nº 1 y nº 2 de Liszt, junto a la Orquesta Sinfónica de Galicia dirigida por Jean-Jacques Kantorow. Fueron dos versiones de alto interés musical y artístico, por cuanto su técnica y expresividad imprimieron el más adecuado carácter a cada obra, desde el Liszt más íntimo y de transparente luminosidad al más fulgurante y cercano a sus poemas sinfónicos.
Su interpretación fue así un bello cotejo de dos conceptos concertísticos bien diferenciadas: en el Concierto nº 1 la oposición entre piano y orquesta fue como un diálogo entre pares, mientras en el segundo se resaltó la gran integración del instrumento solista en el orgánico instrumental sinfónico. Fueron de destacar en este el solo de violonchelo de Davis Ethève y el de oboe de Casey Hill, junto a un más que notable desempeño de la OSG tanto por secciones como en los tutti.
El concierto se abrió y cerró con dos breves y bien diferenciadas obras: Vistas al mar, de Eduardo Toldrà, para orquesta de cuerdas, comenzó animado y luminoso en La ginesta, tuvo un ambiente de calma como a retazos en Allà a les lunyanies de la mar y un tempo algo extremo en el final, La mar estaba alegre. La suite nº 2 de La tempestad, de Sibelius fue, en sus siete movimientos, bien defendida por Kantorow al frente de la OSG y una muestra del dominio de la orquestación del compositor finlandés.
