“Quiero cambiar el partido para cambiar Madrid”

Arropada por un centenar de socialistas críticos con la gestión interna y externa de Tomás Gómez, Pilar Sánchez Acera ha presentado en sociedad su candidatura a la secretaría general del PSM. “Ha llegado el momento del cambio, quiero cambiar el partido para cambiar Madrid y tenemos un proyecto ganador para hacerlo”, ha formulado sus principios la candidata que tras dos semanas de suspense ha terminado aglutinando a todas las corrientes contrarias con la forma de llevar del partido del exalcalde de Parla. El congreso ordinario del PSM se celebra en apenas 10 días (del 2 al 4 de marzo).

“Somos mayoría los socialistas que queremos cambiar el partido para hacerlo más eficaz y abierto a la sociedad. Necesitamos un partido que sume, sin escatimar y dejar de lado a nadie, porque todos cabemos en este proyecto. En definitiva, necesitamos un partido que funcione y lo vamos a hacer en beneficio de los ciudadanos porque, otra manera, otro Madrid, es posible”, ha asegurado Sánchez Acera, la primera mujer que se presenta a la secretaría general del PSM.

“Muchos compañeros me han pedido que diera un paso al frente y así lo hago. La decisión la tomo tras una profunda reflexión personal y colectiva: el debate interno, la serenidad y la búsqueda de un proyecto compartido es lo que necesita nuestro partido”, ha proseguido Sánchez Acera, con una guardia de corps de lujo: con ella compartían mesa Manuel Robles, el alcalde de Fuenlabrada, único bastión que le queda al PSM en lo que se conocía como el cinturón rojo; e Isabel Aymerich, Jefa de gabinete de Ángel Gabilondo en el Ministerio de Educación, asesora de la exvicepresidente María Teresa Fernández de la Vega y cabeza de lista en la agrupación de Chamberí, donde la lista alternativa dio la sorpresa en las recientes votaciones de delegados en una plaza en principio tomasista (ganó 15-13).

“Es una persona joven, excelente, que reúne los valores tradiciones del socialismo madrileño. Cuenta con una experiencia dilatada en la gestión pública, en la Asamblea fue portavoz de algo tan importante para los socialistas como los asuntos sociales. En resumen, tiene experiencia local, parlamentaria y como militante y hará del partido un espacio habitable, abierto, relevante y necesario para la sociedad madrileña frente a un PP que acaba con el Estado del Bienestar”, la ha ensalzado Robles, de los primeros que sonaron como futuribles rivales de Gómez tras la victoria de Alfredo Pérez Rubalcaba sobre Carme Cachón en el Congreso Federal de Sevilla. Las palabras del regidor de Fuenlabrada fueron aplaudidas a rabiar por los asistentes. Estaban Ruth Porta (segunda de Jaime Lissavetzky en el Ayuntamiento), los diputados regionales Modesto Nolla y José Cepeda, José Pablo González (el exalcalde de Villalba), Pedro Castro (ex de Getafe), Rafa Gomez Montoya (ex de Leganés), César Giner, Félix Lausín o Santiago Llorente.

Sánchez Acera no ha escondido su condición de rubalcabista, pero ha negado la menor injerencia de Ferraz en su elección. “Sí, fui la número dos de la lista de Lissavetzky en el congresillo y apoyamos a Rubalcaba en Sevilla. Soy una militante que compartía el sentir mayoritario del partido, pero en mi presentación no hay nada más. No hay una designación de nadie. Los dos candidatos somos candidatos de Madrid, no de ningún otro espacio. Mi trayectoria política es de aquí”, ha recalcado Sánchez Acera, que en su ideario también habla de un PSM “intergeneracional, que sea un espejo de lo que es Madrid”.