Griñán apela al orgullo socialista

La convención para ultimar el programa electoral autonómico que el PSOE de Andalucía celebró ayer en Málaga dejó claro desde el primer minuto que la transformación experimentada por la comunidad en los últimos 30 años será la baza principal para intentar impedir la pronosticada victoria del PP. Los socialistas están dispuestos a desgranar toda la modernización y los avances sociales producidos desde la transición y contraponerlos con los retrocesos que suponen las políticas que el Gobierno de Rajoy ha empezado a aplicar, especialmente el derivado de la reforma laboral, toda una espoleta para la izquierda. En el discurso inaugural del cónclave, el presidente de la Junta y candidato a la reelección, José Antonio Griñán, advirtió a los militantes socialistas de que su reto en las elecciones del 25 de marzo: “No consiste en resistir, sino en avanzar”. Frente al proyecto de Javier Arenas, que identificó con los recortes de prestaciones en otras comunidades autónomas donde gobierna el PP, proclamó que “el auténtico cambio es progresar, no retroceder”.

En el repaso a los numerosos avances de la sociedad andaluza en estos 30 años, los socialistas pueden encontrar el ánimo y la convicción en la victoria que Griñán dijo es condición indispensable para poder conseguirla. “Podemos afrontar estas elecciones no solo con confianza, también con orgullo”, espetó.

Si Arenas dice la verdad, no tendría posibilidades de ganar Alfredo Pérez Rubalcaba

El candidato a la reelección cree que las acciones de Gobierno del PP recargan de razones y de armas al PSOE. Pero también quiere distinguirse en las formas de llegar a la victoria, por eso dijo: “No ofreceremos nunca la luna, sino compromiso y responsabilidad”. “Si un partido cambia sus propuestas cuando llega al poder, o es que mentía a sabiendas o ignoraba la realidad, o las dos cosas, como le ha ocurrido al PP”, censuró. Por el contrario, Griñán reconoció: “No tenemos recetas mágicas, no podemos prometer que acabaremos con el paro solo para ganar las elecciones, eso lo dicen otros, pero si podemos decir que tenemos un proyecto sólido, claro, visible para reactivar la economía y que una crisis como esta nunca vuelva a producirse”.

En esta misma idea abundó el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien dijo que no cabía esperar que Arenas dijera la verdad en la campaña electoral, “porque si lo hace no tiene ninguna posibilidad de ganar las elecciones”. El líder socialista dedicó su intervención a comparar los avances de los servicios públicos andaluces —con el referente del nacimiento de Estrella, una bebé nacida con una estructura genética que permitirá curar a su hermano de una grave enfermedad—, con la privatización de hospitales en Castilla-La Mancha o los recortes en la educación pública en Madrid. Rubalcaba emplazó a recordar “solo una cosa que el PP haya hecho en favor de Andalucía”.

Griñán anunció que su primer acto si es reelegido será reunir a los agentes sociales y representantes de todas las instituciones públicas para promover un plan de choque de empleo concertado, de forma que en un mes estén fijadas las actuaciones y los recursos y, en tres, se inicie su aplicación. Jóvenes, parados de larga duración y procedentes del sector de la construcción serán sus beneficiarios preferentes. El empleo, dijo Griñán, debe ser objetivo único en el que deben implicadas todas las instituciones, “sin mirar el color político ni el ámbito competencial”.