El Gobierno defiende la actuación policial en Jerez contra los trabajadores
Los agentes dicen que intervinieron por graves alteraciones que ponían en riesgo a personas
La Subdelegación del Gobierno en Cádiz ha defendido la actuación de la policía el pasado viernes ante el Ayuntamiento de Jerez, gobernado por la popular María José García Pelayo, cuando se cercó la sede municipal y se disolvieron las protestas de los empleados de subcontratas municipales por los impagos de nóminas y la situación laboral.
La Subdelegación ha negado que la policía cargara contra los manifestantes y ha defendido que fue la Policía Local la que requirió la presencia de más agentes ante centenares de manifestantes trataban de acceder al Ayuntamiento durante la celebración de un pleno.
“La intervención de la Policía Nacional se realizó para proteger personas e instalaciones ante las graves alteraciones de orden público, no habiendo sido necesaria la utilización de material antidisturbios y habiéndose actuado puntualmente sólo con personas concretas que agredieron a algunos policías nacionales", ha afirmado la Subdelegación en un comunicado.
La concentración de trabajadores había sido convocada y comunicada a la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, pero ante la falta de acuerdo sobre la situación laboral en el salón de plenos, "unas 400 personas” comenzaron a “lanzar petardos de gran potencia, dar gritos y utilizar bocinas de gran estruendo", según los responsables de la policía. “Cuando los manifestantes pretendían entrar a la fuerza en el Consistorio, la puerta del mismo hubo de ser cerrada” ya que, continúa el comunicado, los agentes locales que se encontraban delante "estaban siendo empujados y aplastados contra la puerta del Consistorio al tiempo que daban patadas a la misma".
La policía se desplegó entonces en la puerta del Ayuntamiento para "evitar daños a personas y bienes, dada la alteración del orden público que se estaba produciendo". "La avalancha fue de tal magnitud que las personas de la concentración y los propios policías estaban siendo aplastados contra la puerta con grave riesgo para la integridad física de los allí presentes, cayendo al suelo varios funcionarios, resultando lesionado uno de ellos. A la vista del riesgo físico al que estaban siendo sometidos tanto los actuantes como las personas allí concentradas, se realizaron varios disparos de fogueo al aire al objeto de disuadir que dicha multitud continuara empujando y así salvar y proteger la integridad física de las personas, las instalaciones y restablecer el orden público".
La Subdelegación afirma que, después de que se despejaran los accesos, los manifestantes comenzaron a "lanzar objetos sobre los policías actuantes para agredirlos y los agentes se limitaron solamente a responder a las agresiones de algunos de ellos".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.