Nueva cita de la 'marea blanca' contra los recortes en Sanidad

La marea blanca, la protesta de los trabajadores de la sanidad pública en contra de los recortes puestos en marcha por el Gobierno de Esperanza Aguirre, sigue con sus concentraciones semanales frente a los grandes hospitales de la región. Hoy, por cuarto jueves consecutivo, los empleados públicos se han concentrado a mediodía con carteles de protesta. "No a los recortes", se leía en letras rojas en una pancarta que han desplegado los trabajadores del hospital Gregorio Marañón. Frente a este centro han protestado unas 300 personas. Muchos empleados llevaban además carteles más pequeños, impresos en folios, que decían: "Con estos recortes vamos de culo".

Los empleados públicos estaban llamados a manifestarse en contra de la aprobación por parte del Gobierno regional de la ley 6/2011, de Medidas Fiscales y Administrativas para el año 2012. "Esta ley incluye entre otros, dos artículos que afectan directa y negativamente al conjunto de los trabajadores y trabajadoras del Sector Público madrileño: el incremento de la jornada de trabajo de 35 a 37,5 horas semanales y la penalización al personal enfermo con rebajas en el salario durante los días en que estén de baja", asegura el sindicato UGT, uno de los convocantes. 

La concentración de esta mañana forma parte de las movilizaciones que se iniciaron el 27 de diciembre con la protesta de varias decenas de personas frente a la Asamblea de Madrid cuando se votaban las enmiendas a la ley. Está previsto que continúen todos los jueves hasta la manifestación convocada para el 7 de febrero, a la que están convocados todos los empleados públicos, no solo los de la sanidad. 

Después de un mes sin negociaciones, la Consejería de Sanidad convocó ayer la mesa sectorial en la que participan los sindicatos con más presencia entre los más de 60.000 trabajadores de la sanidad pública. El objetivo era negociar la aplicación de la ampliación horaria, pero la reunión acabó sin acuerdos.

El sindicato UGT ha anunciado que llevará los tribunales la ampliación de la jornada laboral de 35 a 37,5 horas una vez que se dicte la instrucción.  Su gabinete jurídico está estudiando los términos de esta demanda, asegura en un comunicado. A juicio de UGT, el aumento de jornada conllevará la destrucción de casi 3.000 puestos de trabajo en 2012 en el sector sanitario. Los afectados serán los trabajadores eventuales e interinos, a los que no se les renovarán los contratos.

El sindicato ha señalado que los trabajadores de atención especializada (hospitales) van a tener que realizar 16 jornadas anuales más, con la consecuente reducción de días de descanso. En el caso de la atención primaria (centros de salud), médicos, enfermeras y demás personal tendrán que realizar el exceso de jornadas en el turno contrario, "supliendo las ausencias por permisos (vacaciones, bajas laborales) de los profesionales". Eso equivale a trabajar más de 12 horas seguidas, añade el sindicato, y a que se dé el caso de que un paciente que tenga que acudir en una semana al médico o a la enfermera varias veces sea atendido por un profesional distinto.