Desmantelado un laboratorio de cocaína en un chalé de Galapagar

Lo que parecía un chalet normal y corriente en Galapagar escondía un completo laboratorio para el tratamiento y adulteración de cocaína, dotado de útiles como prensas hidráulicas, herramientas de laboratorio, microondas y recipientes con sustancias químicas usadas para el corte y adulteración de la droga. La finca contaba con un sistema de vídeovigilancia tanto en el exterior como en el interior y se habían practicado escondrijos ocultos o simulados en suelos y paredes, conocidos como caletas, donde para esconder armas, dinero o droga.

La Policía Nacional ha detenido a sus cuatro responsables, que se dedicaban a la adquisición, manipulación, elaboración y venta de droga en diferentes provincias. En el registro de la vivienda, se han encontrado cuatro kilos de cocaína y 40.000 euros en efectivo.

La investigación, llevaba a cabo por la policía municipal de Galapagar y de Alovera (Guadalajara), comenzó en marzo de 2010 a raíz de varias informaciones aportadas por la Policía Municipal de Madrid, que detectó que un individuo se dedicaba a la venta de coca a pequeños suministradores y a sus propios clientes, tanto en Madrid como en otras provincias. Los agentes localizaron a las personas con las que colaboraba, entre ellas otro individuo con conocimientos para hacer y adulterar estupefacientes, y un tercero que actuaba de correo para su transporte por España.

La investigación reveló que los ahora detenidos pretendían realizar una venta en la provincia de Valladolid, la policía la impidió y detuvo al comprador con un kilogramo de cocaína en su poder. A renglón seguido fueron detenidos el resto de los integrantes de la organización y se llevaron a cabo tres registros para inspeccionar los domicilios de los arrestados, entre los que destaca el chalet en Galapagar.

Por otro lado, la Policía Nacional ha detenido a cuatro personas, que gestionaban un piso de la droga en el distrito madrileño de Puente de Vallecas donde se abastecía diariamente a numerosos toxicómanos que, según denunciaban los vecinos, cometían robos con fuerza y violencia.

Según ha informado la Jefatura Superior de Policía, los detenidos son una mujer española, cabecilla de la banda, y tres hombres africanos que supuestamente vendían droga en una casa baja a cambio de dinero o de artículos robados, lo que había aumentado los atracos y la inseguridad en la zona. Los ahora arrestados no solo les vendían la droga, sino que les ofrecían la posibilidad de consumir la droga en el interior de la casa, en una habitación separada del resto de la vivienda en la que se hacinaban los consumidores.

Dos de los detenidos se ocupaban de controlar el acceso de los consumidores al interior de la finca y de la vigilancia para alertar de cualquier presencia policial. Mientras, la mujer detenida y el tercero de los hombres gestionaban la sala de consumo, donde la policía encontró numerosas dosis tanto de cocaína como de heroína dispuestas para su venta, así como sustancias destinadas a la adulteración y corte de la droga. En el momento del registro había en la casa cinco personas que estaban consumiendo. También fueron localizados pequeños aparatos electrónicos que están siendo investigados para aclarar si provienen de robos.