Carlsen no arriesga ante Ding

Magnus Carlsen ha confirmado hoy con hechos que sigue considerando a Liren Ding como un rival a su altura, o cercano, como dijo en 2019, antes de la pandemia. El multicampeón no ha arriesgado lo más mínimo frente al 2º del mundo a pesar de jugar con blancas en la 3ª ronda del torneo Tata, que catorce estrellas disputan por sistema de liga en Wijk aan Zee (Países Bajos). Ambos comparten ahora el primero puesto (2 puntos en tres partidas) con el neerlandés Anish Giri, el uzbeko Nodirbek Abdusattórov y el estadounidense Fabiano Caruana.

A pesar de que el noruego debe emplearse a fondo para intentar ganar al menos todas las partidas que juega con blancas si quiere lograr el objetivo, cercano a lo imposible, de superar los 2.900 puntos Elo en la lista mundial, hoy no ha hecho nada parecido. Tras cinco movimientos iguales a una partida entre ambos de 2020 por internet, en plena pandemia, que él ganó, Carlsen se desvió por un camino muy conservador, que apenas exigía precisión del chino para alcanzar una posición muy sólida, con ventaja microscópica del campeón, pero con un margen casi nulo para provocar un error que permitiera aumentarla. El empate, sin nada especial que resaltar, se firmó tras el lance 37.

Lo que Carlsen dijo en 2019 sobre Ding, a quien veía como el rival más temible para el duelo por el título, no encaja con lo manifestado por el campeón hace poco más de un año, cuando anunció que renunciaría a la corona salvo que el retador -es decir, el vencedor del Torneo de Candidatos de Madrid, el pasado julio, fuera el francés de origen iraní Alireza Firouzja, porque era el único rival que consideraba motivador para él. Pero hay una explicación lógica: la pandemia fue terrible para la carrera deportiva de Ding, obligado a dos largas cuarentenas que lastraron su rendimiento en el Torneo de Candidatos de 2020 en Yekaterimburgo, que ganó Niepómniashi, quien también fue el vencedor en Madrid, seguido por Ding. Además, el chino sufrió las duras restricciones de su Gobierno para viajar y el horario muy perjudicial de los torneos rápidos por internet para alguien que jugaba desde China.

En Madrid, Ding empezó tambaleante pero jugó muy bien la segunda mitad del Candidatos, lo que lleva a preguntarse si Carlsen habría cambiado de opinión y defendido su título si el asiático hubiera ganado el torneo. Y por extensión lógica, también surge la esperanza de que Carlsen decida jugar el Torneo de Candidatos de 2024 si Ding derrota a Niepómniashi el próximo abril y se convierte en el nuevo campeón del mundo. Carlsen ha dicho varias veces -la más reciente, en una entrevista de 2,5 horas con el youtuber Lex Fridman- que su principal razón para renunciar al título es el miedo a perder ante rivales que él considera claramente inferiores. Y añadió que, de sus cinco duelos por el título desde 2013 (dos contra Anand y uno frente a Kariakin, Caruana y Niepómniashi), solo Caruana era un adversario a su altura en aquel momento (Londres, 2018).

En buena lógica, y si el campeón se siente en buena forma, debería apretar el acelerador en las restantes diez rondas de Wijk aan Zee. Pero no le será fácil hacerlo este martes en la cuarta porque conducirá las negras frente al durísimo Giri, firmante hoy de un empate sin mucha historia con el iraní Parham Maghsoodloo. Y tras el descanso del miércoles tendrá la ventaja de las blancas el jueves frente a otro de los líderes actuales, Abdusattórov, quien tuvo que sufrir un poco para empatar con negras ante el indio Dommaraju Gukesh. De momento, en tres jornadas, Carlsen solo ha subido 0,4 puntos en la lista mundial.

El quinto líder tras la 3ª ronda es Caruana, quien se aprovechó de un defecto bastante frecuente entre las jóvenes estrellas: su confianza casi ciega en los jugadores inhumanos (los programas que calculan millones de movimientos por segundo y juegan mucho mejor que el campeón del mundo). Su rival de hoy, el neerlandés Jorden van Foreest, de 23 años, ha hecho algo en la apertura que hace un cuarto de siglo se consideraba poco menos que sacrílego: regalar al adversario una casilla fuerte en pleno centro (e5), lo que implica el gran riesgo de quedarse con una desventaja no muy grande pero sí muy molesta durante toda la partida. Van Foreest confiaba en algunos trucos tácticos aprendidos de su entrenador de silicio. Pero Caruana los evitó cuidadosamente, se quedó con una consistente ventaja posicional y ganó de manera inapelable.

Los duelos Praggnanandhaa-Keymer (más de seis horas) y Erigaisi-Aronián (casi seis) fueron muy largos y terminaron en tablas. La lucha entre el rumano Richard Rapport y el estadounidense Wesley So fue un empate bastante rápido, pero interesante.

Tercera ronda: Rapport – So, tablas; Caruana – Van Foreest, 1-0; Gukesh – Abdusattórov, tablas; Maghsoodloo – Giri, tablas; Carlsen – Ding, tablas; Praggnanandhaa – Keymer, tablas; Erigaisi – Aronián, tablas.

Clasificación: 1º-5º Ding, Carlsen, Abdusattórov, Giri y Caruana 2; 6º-10º Aronián, Praggnanandhaa, Erigaisi, So y Maghsoodloo 1,5; 11º-13º Van Forest, Rapport y Keymer 1; 14º Gukesh 0,5.

Cuarta ronda (martes 14.00): So – Aronián; Keymer – Arjun; Ding – Praggnanandhaa; Giri – Carlsen; Abdusattórov – Maghsoodloo; Van Foreest – Gukesh; Rapport – Caruana.

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