Firouzja motiva a Carlsen

Magnus Carlsen siempre ha dado una imagen de transparencia y franqueza. También ha reconocido que motivarse para seguir siendo el número uno es un problema serio. Ahora une ambos hechos: “Estoy muy impresionado por Alireza Firouzja. Que haya logrado ser el número dos a los 18 años es mi principal estímulo ahora mismo”, dijo en Dubái este viernes, minutos después de lograr su quinto título mundial, frente al ruso Ian Niepómniashi (7,5-3,5).

Si esas frases vinieran de una mente muy retorcida, como la de Anatoli Kárpov durante sus encarnizados duelos con Gari Kaspárov, podría pensarse que son una manera de meter presión a Firouzja desde ya, cuando apenas asoma la cabeza en las cercanías de la cumbre del ajedrez. Los focos estarán ahora centrados en él ante el próximo Torneo de Candidatos, previsto para mediados de 2022, cuyo vencedor retará a Carlsen hacia febrero de 2023. Pero en el caso del noruego todo encaja: tras destrozar a Niepómniashi en el duelo por el título menos difícil de los cinco que ha ganado, y cuando todavía le faltan ocho años para igualar la marca estratosférica de Kaspárov (número uno durante veinte años seguidos), ¿qué otro factor puede estimularle más que la amenaza de un genio en ciernes? Y Carlsen aportó datos objetivos: “La manera en que Alireza acaba de ganar el torneo Gran Suizo [que le dio la plaza para el Candidatos] y su gran resultado en el Europeo de Naciones [debutó con Francia] me han impresionado muchísimo”.

Esas hazañas serán pequeñas si se comparan con lo que supondría ganar tan precozmente el Torneo de Candidatos frente a siete fieras de primera fila mundial. Pero ninguno de los expertos consultados por este periódico se atreve ya a descartas que eso ocurra, porque Firouzja cumple todos los requisitos para ser llamado genio. Falta por aclarar si en la actualidad trabaja con un entrenador de primera fila. Hasta que se marchó de Irán (diciembre de 2019) a Chartres (Francia), solo se sabe que tuvo algunas sesiones con el bosnio Iván Sokólov. Antes de la pandemia viajaba solo con su padre. Al autor de esta crónica no le consta que lo haya hecho con algún entrenador de postín a los torneos importantes más recientes. Se da por supuesto (porque ha mejorado sustancialmente en algunos puntos débiles) que en los últimos meses sí ha cuidado mucho más su preparación, pero nadie ha revelado nombres ni detalles concretos.

En todo caso, puede asegurarse que Firouzja está aún a años luz del campeón en cuanto a su equipo de apoyo. Chess24, una de las empresas del grupo Play Magnus, del que Carlsen es el principal accionista, reveló el viernes por la noche un vídeo grabado durante la concentración del escandinavo en el hotel Royal Hideaway Sancti Petri de Chiclana (Cádiz) en octubre. En él se ve a su entrenador desde hace años, el danés Peter Haine-Nielsen, al ruso Danil Dúbov, al francés Laurent Fressinet, al holandés Jordan Van Foreest y al alemán Jan Gustafsson. Y Carlsen explica cómo tiene repartido el trabajo.

Un matiz interesante es que, además, el franco-iraní también es muy bueno en las modalidades rápidas. Carlsen se reafirmó en la conferencia de prensa del viernes en que tiene “la mente abierta” a cualquier reforma que se proponga en el formato del Campeonato del Mundo; por ejemplo, combinar la modalidad clásica (lenta) con la de partidas rápidas o relámpago. En cualquiera de los tres, un duelo de Carlsen contra una versión muy afinada de Firouzja sería sumamente atractivo.

Carlsen ya prevé esos escenarios, a juzgar por lo que dijo cuando le preguntaron cómo va a celebrar su quinta corona: “Acabo de enterarme de que el Mundial de Rápidas de fin de año, que se ha cancelado en Kazajistán por la situación del covid, se hará en Polonia. Jugarlo será mi mejor celebración”.

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