Nakamura también perdona a Niepómniashi

La suerte influye muy poco en el ajedrez. Pero hay excepciones que pueden ser decisivas. Por ejemplo, si el ruso Ian Niepómniashi gana el Torneo de Candidatos de Madrid, donde lidera tras cinco rondas de las catorce previstas, es muy probable que deba ese éxito a dos regalos, de los estadounidenses Fabiano Caruana y Hikaru Nakamura en las rondas 2ª y 5ª. “Hoy ha sido mi día de suerte”, admitió el eslavo. En realidad, fue su 2º día de gran fortuna.

Las cuatro partidas de este miércoles terminaron en tablas: Caruana no pudo doblegar a Rapport (Hungría); Liren Ding (China) malogró una posición ganadora frente a Teimur Radyábov (Azerbaiyán); y Alireza Firouzja (Francia) firmó un empate balsámico con Jan Duda (Polonia). La 6ª se disputa el jueves desde las 15.00 en el Palacio de Santoña, y se puede seguir en directo por elpais.com y sus canales en YouTube.

El inicio de la ronda sirvió para recordar de manera muy gráfica que, según varios estudios científicos, el ajedrez es un magnífico gimnasio mental para retrasar el envejecimiento cerebral y tal vez prevenir el alzhéimer. El saque de honor correspondió esta vez a Manuel Álvarez, un ajedrecista activo de 100 años, con una agilidad mental que ya quisieran muchas personas bastante más jóvenes. Y la firma multinacional de abogados Ashurst invitó a una veintena de sus mejores clientes a ver desde muy cerca a los gladiadores del tablero durante unos minutos. Lo que más les impresionó fue “la tensión tremenda que se palpa en el ambiente”, coincidieron varios de ellos.

Cabía esperar que la mayor tensión se viviera en el duelo Nakamura-Niepómniashi, pero de manera muy distinta por ambos. Nakamura tuvo el desparpajo de decir el domingo que en este torneo pierde dinero, en comparación a lo que ganaría si se dedicase durante las tres semanas al streaming (jugar y comentar sus propias partidas por internet), que le ha hecho rico durante la pandemia. La lógica dicta que un jugador no entregado en cuerpo y alma al Candidatos no puede ganarlo, pero es cierto que el talento de Nakamura es gigantesco y que jugar sin meterse presión puede ser beneficioso.

Como mínimo, es muy capaz de ganar varias partidas más (derrotó a Radyábov en la 2ª tras caer ante Caruana en la 1ª). Y bordeó la victoria de nuevo este miércoles ante el líder. Tras el vigésimo lance del estadounidense nacido en Japón, la posición del ruso, que juega bajo la bandera de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) era lamentable. Aún no estaba perdido, pero sí muy trabado, sin armonía.

Pero hete aquí que Nakamura se hizo un lío por tres veces, recurriendo a jugadas sofisticadas cuando las más naturales le daban una tremenda ventaja. Luego explicó que no había visto una maniobra salvadora de la dama de su rival. Pero eso suena poco convincente. Ese tipo de errores suelen deberse a falta de concentración. Dado su inmenso talento, Nakamura, de 34 años, podría estar aún varios más en la élite. O incluso jugar torneos de veteranos a los 100, como Manuel Álvarez. Pero es muy improbable que tenga muchas más oportunidades de tumbar a un subcampeón del mundo con una ventaja tan clara como la de este miércoles en el Palacio de Santoña.

Clasificación (tras la 5ª ronda): 1º Niepómniashi 3,5 puntos; 2º Caruana 3; 3º-5º Rapport, Duda y Nakamura 2,5; 6º-8º Firouzja, Ding y Radyábov 2.

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