Tablas decepcionantes
Las partidas Yesipenko-Carlsen y Dúbov-Mamediárov terminan en empates por mutuo acuerdo en posiciones muy dinámicas
La primera ronda del Roland Garros del ajedrez ha sido mucho menos interesante de lo que prometía, por la ausencia de normas que impidan o dificulten empates no justificados. Dos de los duelos más esperados han terminado en frustrantes acuerdos de tablas: el del ruso Andréi Yesipenko, de 19 años, frente al noruego Magnus Carlsen, campeón del mundo; y el de otro ruso muy creativo, Danil Dúbov, de 25, contra el azerbaiyano Shajriyar Mamediárov, 9º del mundo.
El comité organizador del torneo Tata Steel de Wijk aan Zee (Países Bajos), donde el ajedrez tiene una cita muy importante cada enero desde hace 84 años, siempre fue poco innovador. Su director, Jeroen Van den Berg, responde así a la pregunta de por qué el reglamento no prohíbe las tablas por acuerdo mutuo (al menos antes de las 30 o 40 primeras jugadas) como ocurre en otros muchos torneos de élite: “Nunca las hemos tenido. El contrato de cada jugador dice que no nos gustan nada los acuerdos de tablas, y que si son demasiados pueden acarrear la no invitación para próximas ediciones. Pero tenemos en cuenta que es un torneo largo [13 rondas] y duro”.
Los jugadores no pueden argüir cansancio en la jornada inaugural, pero sí es cierto que Carlsen suele necesitar varias rondas para entrar en calor y rendir al máximo. De hecho, hoy omitió un golpe táctico muy peligroso para Yesipenko (17 …d4 en lugar de De7). Cuatro lances después ofreció tablas, y el ruso las aceptó cuando podía ganar un peón a cambio de ceder el par de alfiles al noruego, o bien optar por continuaciones de menor riesgo; en ambos casos, la posición estaba llena de vida.
En todo caso, esa actitud del campeón no encaja con el objetivo -o más bien la hazaña- que se ha propuesto como estímulo: llegar lo antes posible a los 2.900 puntos en la lista mundial (con los dos perdidos hoy, se queda en 2.863). Carlsen necesita 9 puntos sobre los 13 posibles en Wijk aan Zee para no bajar en el escalafón.
Más frustrante aún ha sido el desenlace de la gran pelea de la jornada. Dúbov salió a por todas con una estrategia de muy alto riesgo frente a un rival durísimo. El ruso entregó un peón a muy largo plazo a cambio de armonía, actividad e iniciativa; y luego otro para aumentar la presión. Cuando ambos estaban apurados de tiempo, Mamediárov eligió la variante más compleja a pesar de que disponía de otra mucho más sólida. Pero, al parecer, Dúbov se asustó por la dificultad extrema de la posición con solo un par de minutos para diez movimientos, y ofreció el reparto del punto.
El polaco Jan Duda, de 23 años, logró una victoria muy elegante sobre otro de los participantes más prometedores, el húngaro Richard Rapport, de 25. El neerlandés Jorden Van Foreest, sorprendente ganador el año pasado, se ha impuesto al sueco Nils Grandelius. El indio Santosh Vidit se impuso al estadounidense Sam Shankland tras seis horas de duro combate. Y una de las notas más interesantes de la jornada es la dureza del prodigio indio Rameshbabu Praggnanandhaa, de 16 años, quien resistió con negras la embestida del neerlandés Anish Giri, 8º del mundo, mucho más agresivo de lo habitual en él. Mañana se enfrenta a Carlsen.
Resultados (1ª ronda): Yesipenko – Carlsen, tablas; Dúbov – Mamediárov, tablas; Caruana – Kariakin, tablas; Giri – Praggnanandhaa, tablas; Duda 1 – Rapport 0; Van Foreest 1 – Grandelius 0; Vidit 1 – Shankland 0.
2ª ronda (domingo): Shankland – Grandelius; Rapport – Van Foreest; Praggnanandhaa -Duda; Carlsen – Giri; Mamediárov – Yesipenko; Kariakin – Dúbov; Vidit – Caruana.
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