_
_
_
_
ocio digital

Nueve maneras para evitar morir por un ‘selfi’

El riesgo al hacerse un autorretrato vive una escalada: se busca impactar a personas cercanas y a grandes audiencias. Los resultados, muchas veces, son desastrosos

Karelia Vázquez
Kirill Oreshkin, rey del 'selfi' extremo.
Kirill Oreshkin, rey del 'selfi' extremo. Kirill Oreshkin

En el mundo del selfi —o del autorretrato, si es usted un purista de la lengua— importa cada vez menos quién sale en la foto, y cada vez más, el escenario y la adrenalina liberada tras cada imagen.

Los selfis extremos parecen el destino natural de una moda que evoluciona o perece. ¿Acaso queda algo más que contar después del enésimo selfi? El narcisismo que ha apuntalado el éxito de estas prácticas no es suficiente y también necesita reciclarse. Mezcle esa misma dosis de ego con una descarga de adrenalina y, si se tercia, un palo para selfis, y el fenómeno habrá ganado varios años de vida.

La llegada del palo —una herramienta que permite tomar imágenes con mayor perspectiva, de paso, disimular papada y ojeras, y conseguir, al fin, un selfi con buena cara— ha animado al personal que está dispuesto a arriesgar su vida por conseguir que una de sus fotos se haga viral.

Con el 'selfi' temerario no solo se liga y impresiona a los amigos, también se hace carrera en Internet

Hace unas semanas, el Ministerio del Interior ruso lanzó una campaña de eslogan terrorífico: "Tu próximo selfi puede ser el último". El gobierno de ese país confirma 10 muertes y más de 100 heridos en lo que va de año por culpa de los autorretratos temerarios. Algunos casos, como en el de Xenia Ignatyeva (de 17 años) dejan un selfi póstumo para los anales de la historia. La joven se encaramó a un puente de nueve metros de altura y se hizo una foto. A continuación, perdió el equilibrio y cayó sobre un cable de alto voltaje que la electrocutó.

Con el selfi temerario no solo se liga e impresiona a los amigos, también se hace carrera en Internet. Ahí tenemos a Kirill Oreshkin, famoso por sus fotos al borde de casi todos los abismos. No parece raro que las infografías que acompañan la campaña rusa de seguridad hagan referencia a historias de casos reales: selfis con animales salvajes que acabaron atacando al fotógrafo, selfis al borde de azoteas donde alguien pisó por accidente un cable de alta tensión, selfis con las armas de fuego (al parecer, muy populares en Rusia), tomados en las vías del tren (con el tren muy cerca, que si no, no tiene gracia).

Que nadie que nadie se sienta libre de pecado. España protagonizó en marzo de 2014 una de las primeras muertes por selfi del mundo. Varios amigos subieron al techo de un tren detenido en Andújar (Jaén) para hacerse la foto. Uno de ellos, de 21 años y vecino de la pedanía de Vegas de Triana, tocó un cable de 3.500 voltios y murió.

Los peligros del 'selfi' con una ardilla.
Los peligros del 'selfi' con una ardilla.

Como las ganas de liberar adrenalina aumentan cuando se está de viaje y fuera de los ambientes rutinarios, hemos elaborado una guía fácil para sobrevivir a los selfis estas vacaciones.

1. Las situaciones de peligro son reales, incluso si las observa a través de la cámara del móvil.

Su teléfono es muy inteligente y puede ser caro. Tiene muchas prestaciones, pero entre ellas no está que su pantalla lo proteja de ese tren que se acerca y que parece que va a atropellarlo de un momento a otro. Si en la pantalla está a punto de pasarle por encima, seguramente está a punto de hacerlo en la realidad.

Caso verificado: Cuatro amigos indios viajaban en coche para ver el Taj Mahal y decidieron parar para hacerse un selfi en la vía cuando pasara el tren de alta velocidad, "lo más cerca posible", según el testimonio del único superviviente. Un error de cálculo de tiempo y distancia provocó que el tren los atropellara.

2. No espere a estar muy borracho para empezar a hacerse fotos.

El alcohol desinhibe, altera su percepción de a realidad, le hace perder el equilibrio, le hace creer en sus superpoderes. Cualquier selfi temerario lo será aún más si ha bebido.

Caso verificado: Óscar Otero Aguilar, mexicano de 21 años, pasaba la tarde en la casa de un amigo donde llevaban varias horas bebiendo. Era aficionado a hacerse selfis con coches y con armas, así que en algún momento de la velada le pareció buena idea hacerse una foto apuntándose a la cabeza con una pistola que se disparó accidentalmente. Sucedió en julio de 2014. Su intención era publicar la foto en Facebook. No pudo ser: murió. 

3. Absténgase de hacerse selfis mientras conduce. Están muy vistos, no impresionan a nadie y, además, son peligrosos.

Un estudio de Ford revela que uno de cada cuatro europeos de entre 18 y 24 años se ha hecho una foto mientras conducía. Los que lideran la lista son los británicos, los alemanes y los franceses. En España solo un 18% de los encuestados dijeron ser aficionados a los selfis al volante.

Caso verificado: El 26 de abril de 2014 Courtney Sanford, de 32 años, publicó un selfi y un comentario en Facebook mientras conducía por Carolina del Norte. Eran las 8.33. Segundos después, su coche chocaba con un camión y ella moría en el acto. La policía recibió el aviso de accidente a las 8.34.

Una de las señales de advertencia del Ministerio del Interior ruso.
Una de las señales de advertencia del Ministerio del Interior ruso.

4. Los animales, vivan en libertad o cautiverio, no quieren hacerse un selfi con usted. Asúmalo.

Las historias de personas atacadas por animales que esperaron pacientemente a que el fotógrafo terminara su obra para atacar indican que no es una buena idea dejar testimonio gráfico de sus andanzas por la selva, su safari en Kenia o su visita al zoo del Bronx. Además, los parques nacionales estadounidenses recomiendan a sus visitantes abstenerse de "la estupidez" de hacerse un selfi con osos. "Los osos son animales salvajes e impredecibles, que pueden atacar si son agredidos. No podemos permitir que los visitantes creen situaciones peligrosas para ellos mismos y otras personas", indican en un comunicado. Por su parte, la portavoz del parque nacional Lake Tahoe, Lisa Herron, asegura haber visto hordas humanas persiguiendo a los osos para tomarse un selfi con ellos.

Casos verificados: Un hombre fue atacado por un cisne en el Zoológico de Kansas sin grandes consecuencias. Otro espontáneo fue atacado por una ardilla que esperó taimada a que terminara su selfi y se retirara para atacarlo por la espalda. El protagonista publicó la secuencia gráfica en Reddit.

5. Si no puede mantener el equilibrio, no se haga un selfi.

Si ha llegado a un sitio que por la altura, la topología del terreno o las corrientes de aire le obliga a estar sujeto con ambas manos no libere una para sacar el móvil y dejar testimonio de su paso por allí. Puede ser lo último que haga ese día.

Casos verificados: La adolescente italiana Isabella Fracchiolla, de 16 años, intentaba hacerse un autorretrato en los acantilados de la costa de Taranto, donde estaba de viaje de estudios con sus compañeros de clase. Cayó desde una altura de 18 metros y falleció ante sus amigos. También cayeron al vacío mientras se fotografiaban Michal Mackowiak y su esposa, de nacionalidad polaca, esta vez desde un acantilado de Cabo da Roca en Sintra, Portugal. Sus hijos de 5 y 6 años fueron testigos de la terrible escena.

6. Los tejados y los puentes son superficies finitas. No lo olvide.

Por mucho que aún no haya conseguido el encuadre que desea para su foto, el final de la azotea y del puente están definidos por el arquitecto responsable de la obra desde el año de su construcción, y usted no puede luchar contra la ley de la gravedad. Son dos hechos independientes de su pasión por la fotografía. Tenga en cuenta, además, que en ambos sitios puede haber cables de alta tensión.

Caso verificado: Una estudiante polaca de 23 años, identificada con las siglas R. S. A., cayó al camino de hormigón del margen del río Guadalquivir mientras intentaba hacerse un autorretrato con el puente de Triana de fondo. La joven falleció días después de la caída.

7. Si no sabe manipular un arma no se haga un selfi. Si sabe, tampoco; no tiene ninguna gracia.

Lamentablemente, el llamado 'gun selfi'  ('selfi' con arma) ya constituye en sí mismo una categoría dentro de este tipo de fotos

Las autoridades rusas lo dicen en su campaña: "Un selfi con un arma puede matar". Lamentablemente, el llamado gun selfi (selfi con arma) ya constituye en sí mismo una categoría dentro de este tipo de fotos.

Casos verificado: Un joven moscovita de 21 años se disparó accidentalmente en la cabeza mientras se hacía una autofoto con pistola. El chico sobrevivió para contarlo. No quedó testimonio gráfico, pero sí una enorme cicatriz de guerra. El mayo pasado y también en Moscú, una mujer encontró un revólver de nueve milímetros en su oficina e intentó hacerse un selfi, pero apretó el gatillo y se disparó en la cabeza. El arma pertenecía al jefe de seguridad de la compañía, que estaba de vacaciones.

8. En las noches de tormenta deje el palo 'selfi' en casa. Tampoco lo lleve a fiestas multitudinarias, ni a parques de atracciones.

El palo metálico puede atraer hacia usted las descargas eléctricas de la tormenta, y aunque haga buen tiempo, un palo de selfi en una multitud y un sujeto fascinado por su propia imagen en perspectiva son una combinación perfecta para provocar un accidente. Si se juntan dos sujetos de esas características con sus respectivos palos el choque puede ser mucho más grave que el de sus propios egos.

Caso verificado: El 8 de julio de 2015 quedará grabado en la historia de la tecnología, si es que alguien está llevando ese registro, como el de la primera muerte causada por un palo de selfi. Sucedió en el parque nacional de Brecon Beacons en Gales (Reino Unido). Un senderista, en medio de una tormenta, fue alcanzado por un rayo y murió. Según el diario The Telegraph, el hombre llevaba un palo de selfi que pudo haber actuado como pararrayos.

9. En caso de ego desbordado, opte por un montaje. Es más seguro y, en cualquier caso, Internet es un territorio difícil de verificar.

Caso (de montaje) sin verificar: El australiano Terry Tufferson se grabó en la primavera de 2014 luchando a brazo partido contra un tiburón blanco después de haber saltado de un puente en Sidney. En agosto otro vídeo suyo volvió a ser viral, esta vez su coche se acercaba peligrosamente a un tornado. Tanto que Terry se baja para vivir con más intensidad la experiencia. Tanta suerte para sobrevivir al peligro y semejante desparrame de adrenalina han disparado todas las sospechas en Internet que, de momento, mantiene la autenticidad de sus selfis en cuarentena.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Karelia Vázquez
Escribe desde 2002 en El País Semanal, el suplemento Ideas y la secciones de Tecnología y Salud. Ganadora de una beca internacional J.S. Knigt de la Universidad de Stanford para investigar los nexos entre tecnología y filosofía y los cambios sociales que genera internet. Autora del ensayo 'Aquí sí hay brotes verdes: Españoles en Palo Alto'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_