_
_
_
_
_

Chaves no repetirá como diputado aunque sea exonerado por el Supremo

La marcha de los dos últimos expresidentes favorece la investidura de Díaz

Griñán (a la izquierda) y Chaves en diciembre de 2011.
Griñán (a la izquierda) y Chaves en diciembre de 2011.Alejandro Ruesga

Manuel Chaves, expresidente de Andalucía y actual diputado nacional del PSOE, de 69 años, concluirá su vida política al final de la presente legislatura del Congreso, dentro de siete meses. No volverá a concurrir en ninguna candidatura. Su sucesor al frente de la Junta, el también socialista José Antonio Griñán, hoy senador de designación autonómica, acaba de anunciar su decisión de retirarse de la política. Aunque Chaves no va a seguir inmediatamente ese paso, solo unos meses van a separar al final ambas retiradas.

De esta manera, los dos expresidentes socialistas andaluces estarán fuera de la política en breve, por lo que desde el PSOE se considera que este hecho puede favorecer la investidura de Susana Díaz a la presidencia de la Junta de Andalucía. Esta es la hipótesis que barajan tanto en la dirección federal del PSOE como en la de Andalucía.

Más información
Griñán: "No quiero ser un obstáculo"
Chaves defiende en el Supremo sus 19 años en la Junta de Andalucía
Golpe a la defensa de Chaves y Griñán en el Supremo
Griñán y Chaves abren su batalla judicial en el Tribunal Supremo
El Parlamento prevé la investidura en víspera de la campaña del 24-M
La marcha de Griñán reabre la opción del pacto entre PSOE y Ciudadanos

Los partidos de la oposición andaluza, singularmente Ciudadanos y Podemos, han puesto la renuncia de ambos políticos socialistas como condición imprescindible para facilitar la investidura de Díaz. Aún no se han dado del todo esas condiciones, sino solo al 50% con la renuncia de Griñán. Pero el tiempo de Chaves está tasado.

Chaves y Griñán han seguido caminos diferentes porque ambos se distanciaron tras haber mantenido muchos años una estrecha amistad. Además de la situación personal —se muestran fríos, pero respetuosos el uno con el otro y defienden su inocencia mutuamente— la política también les separa y les diferencia.

La apariencia puede llevar a concluir que el senador Griñán ha tenido más en consideración a su partido que Chaves, al dar el paso de retirarse del Parlamento. No obstante, su voluntad ha coincidido con la de la dirección del PSOE de Andalucía, que encabeza Susana Díaz.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Distintas fuentes consultadas informan taxativamente de que Griñán no iba a figurar en la lista para el Senado que el Parlamento andaluz remitirá a la Cámara alta en los próximos días. Algunos de estos interlocutores aseguran que el senador conocía esta decisión. Así las cosas, Griñán se hubiera visto sin escaño antes de la mitad del mes de mayo, con o sin su voluntad.

La diferencia con Chaves viene dada porque la dirección del PSOE no va a pedirle que deje su escaño, según confirman fuentes de la dirección socialista. Al tiempo avalan la certeza de que el expresidente andaluz no figurará en ninguna lista cuando termine su mandato, con la legislatura.

Las cuentas

  • El presidente del Parlamento de Andalucía, Juan Pablo Durán, comienza el lunes ronda de consultas previa a la propuesta de candidatura a la presidencia de la Junta con el PSOE y el PP. El martes se verá con los de Podemos, Ciudadanos e IU.
  • El miércoles 29 de abril, se celebrará Mesa del Parlamento y Junta de Portavoces para preparar el pleno de debate de investidura, previsto entre el 4 y el 7 de mayo.
  • El Parlamento andaluz cuenta con 109 escaños: 47 del PSOE, 33 del PP, 15 de Podemos, 9 de Ciudadanos y 5 de IU.
  • Susana Díaz necesita mayoría absoluta (55) en primera votación para salir investida, por lo que sería necesario el apoyo de Ciudadanos.
  • Si esta opción fracasa, en una segunda votación, la candidata necesitaría la mayoría simple, lo que haría necesaria la abstención del PP.
  • En caso de repetirse el desacuerdo de forma reiterada y transcurrido el plazo de dos meses a partir de la primera votación, se procederá a la convocatoria de nuevas elecciones.

Chaves aún no se muestra explícito públicamente. “Cuando tome una decisión, lo comunicaré” dijo este jueves a EL PAÍS. “La decisión de Griñán hay que ponerla en relación con su dependencia del Parlamento andaluz y en la proximidad de que haya nuevos senadores por designación autonómica”, apostilló para marcar la diferencia, toda vez que la lista de senadores va a ser renovada de inmediato.

La situación jurídica, por el caso de los ERE, es parecida, pero cada uno ha medido de forma diferente los tiempos. Griñán ha tratado su situación con el PSOE andaluz, en tanto que la de Chaves se relaciona con la dirección federal. Además, el que los nuevos senadores autonómicos vayan a ser propuestos en breve obligó a Griñán a adoptar los pasos que el PSOE andaluz esperaba. El día siguiente de declarar ante el Tribunal Supremo, el expresidente envió una carta a la presidenta en funciones con la renuncia a cualquier cargo.

Griñán y Chaves ya han declarado por el caso de los ERE, el fraude con ayudas públicas a empresas en crisis que investiga la juez Mercedes Alaya desde 2011. “No puedo ni debo someter al partido a esta presión. La situación actual en Andalucía es delirante porque la primera fuerza le saca un 15% a la segunda, y, sin embargo, no puede gobernar”, declaró Griñán a EL PAÍS.

El expresidente daba a entender así que con su retirada facilita la vida a su partido para que Susana Díaz pueda ser investida presidenta. Por mucho interés que existe en el PSOE de que esto se produzca, cumplirá su compromiso en el que no figura pedir en frío a Chaves que deje el escaño. Sí conoce su intención de no prolongar su estancia en la política más allá de esta legislatura. Esta certeza le llevó este jueves al secretario de Organización del PSOE, César Luena, a expresar su creencia de que Chaves no estará en el futuro Parlamento.

No obstante, los planes de agotar la legislatura se truncarán si el Tribunal Supremo decide imputarle algún delito. La dirección federal le pedirá que deje el escaño, según se comprometió Pedro Sánchez, yendo más lejos de lo que dice el Código Ético del PSOE que establece esa medida cuando se abra juicio oral. Será “con todo dolor de corazón”, señalan en la dirección socialista, pero lo harán.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_