La Unión Europea de los ciudadanos

Bueno es que los europeos nos alegremos de que en Holanda se haya frustrado que gobierne el partido más xenófobo de ese país, pero parece que el partido ganador lo ha sido por no tener empacho en asumir buena parte de las aspiraciones xenófobas del perdedor. Es probable que ese “ejemplo” cunda en las elecciones en Francia y Alemania, que tengan la misma frustración sus respectivas ultraderechas (ojalá que así sea). Mas el ejemplo imprescindible es que la Unión Europea recupere y aumente sus energías democráticas, que los europeos confiemos más en nosotros mismos que en los temores y miedos que alimentan nuestras fobias. La sociedad civil europea sabe y puede acoger, asilar y regenerarse.— Gaspar García Fernández. Madrid.