Poder, abusos o ¿chantaje?
Uno de los productores más poderosos de Hollywood, Harvey Weinstein, acusado por una modelo italiana de propasarse con ella
Uno de los hombres más poderosos de Hollywood, Harvey Weinstein, y una belleza desconocida en Estados Unidos hasta hace una semana, la modelo italiana Ambra Battilana, protagonizan una historia de presunto abuso sexual aunque hay quien piensa que en realidad se trata de un chantaje. El productor de 63 años al frente —junto a su hermano Bob— de la compañía que lleva su apellido y con una fortuna valorada en 186 millones ha sido acusado de propasarse con la joven aspirante a actriz, de 22 años. Una historia que podía estar en cualquier guion de Hollywood y que aúna poder, sexo y dinero pero que en esta ocasión está escrita en los informes de la policía neoyorquina donde la italiana ha presentado una denuncia contra el todopoderoso productor. Pero el caso cuenta incluso con una precuela dado que la supuesta víctima fue testigo en el caso contra el exprimer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ya que ella asistió como invitada a las fiestas que el político celebró en 2010 y que se acabaron conociendo con el apodo de “bunga bunga”.
Por el momento no han sido presentados cargos contra el productor en una denuncia donde Battilana ha cambiado ya de abogados mientras que los Weinstein hablan de que todo obedece a un intento chantaje. De todas las grandes figuras que se mueven por Hollywood, pocas representan el apetito voraz de una industria que consume y escupe los sueños de aquellos que aspiran a formar parte de esta maquinaria como Harvey Weinstein.
Su amor por el cine es tan conocido como su explosivo su genio. Es un hombre que no acepta un "no" por respuesta y que es tan respetado como temido por estrellas y empleados por igual. Su círculo de amigos es estelar: Quentin Tarantino, Gwyneth Paltrow, Matt Damon, Ben Affleck, entre otros muchos, a los que é ha ayudado a encumbrar en Hollywood. Harvey Weinstein también abogó con fiereza por poner fin a los cargos que pesan sobre Roman Polanski ante la justicia estadounidense. Pero su poder se mide además en los Oscar donde sus producciones siempre tiene reconocimiento. Entre sus caballos ganadores figuran películas que han hecho historia como Shakespeare enamorado, El discurso del rey, El paciente inglés, Gangs de Nueva York, Pulp Fiction o El indomable Will Hunting, entre otras. La suya ha sido una carrera de puntos álgidos y no tan álgidos. Fundador con su hermano de Miramax, compañía que bautizó con el nombre de sus padres, Miriam y Max, con ella marcó una era en el mundo del cine independiente. Pero la venta de su biblioteca de películas a los estudios Disney le dejó sin su propia empresa. Fundó una nueva productora, The Weinstein Company, donde mantuvo su fama de conseguir lo quiere a cualquier precio.
La Academia de Hollywood ha reescrito en varias ocasiones su reglas en lo referente a la promoción de las películas en su carrera a los Oscar para poner freno a sus campañas. Sus ambiciones le han llevado a las manos en alguna que otra airada discusión de Hollywood o al lecho de muerte de Sydney Pollack para exprimir un poco más los conocimientos del director y productor en una de sus últimas películas. No hay duda de que a Harvey Weinstein su fama le precede pero hasta la fecha nunca había tenido problemas con la justicia. Padre de cinco hijos, ha estado casado en dos ocasiones, la primera con su asistente Eve Chilton y en la actualidad con la diseñadora de moda Georgina Chapman, 25 años menor que él.
Weinstein está colaborando con las autoridades en esta investigación, acudiendo voluntariamente a responder a las preguntas de los agentes encargados que también están escuchando las acusaciones de Battilana, aspirante a Miss Italia en busca de una nueva carrera en Hollywood y que acaba de abrir una nueva cuenta de Twitter en la que su lema es “no dejes de soñar porque hayas tenido una pesadilla”.
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