Lupita Nyong’o encandila a las marcas de lujo
La ‘mexikeniata’ es la primera negra que ficha como rostro de Lancôme tras ganar un Oscar Firmas como Dior, Calvin Klein y Gucci se pelean por vestirla para las alfombras rojas
Lupita Nyong’o creció sin sentirse guapa. Su madre le solía repetir lo hermosa que era, pero cada vez que encendía la televisión, la niña se encontraba con imágenes de mujeres de tez clara y pelo lacio, que físicamente no tenían nada que ver con ella. “Rezaba para que, al despertarme, descubriera que me había puesto menos oscura”, ha revelado. El tiempo demostró que sus plegarias no necesitaban ser atendidas. Este año, el mismo en el que recibió un Oscar, la actriz fue elegida la persona más bella del mundo por la revista People y se alzó como la primera intérprete de raza negra que consigue un contrato como imagen de Lancôme. De esta manera, se une a otras embajadoras de la prestigiosa firma francesa, como Penélope Cruz, Julia Roberts y Kate Winslet, algo que no se hubiera imaginado cuando recibía burlas por su piel color noche, como poéticamente ella misma la describe. Con este contrato, la actriz nacida en México y criada en Kenia se posiciona como una rara avis dentro de una industria tan conservadora como es la de la cosmética, que sigue ignorando la gran proporción de mujeres negras que consumen sus productos. A sus 31 años, la intérprete, a quien le gusta coquetear con el mundo de la moda, redefine los arquetipos mediáticos de belleza. Porque incluso las mujeres negras que copan las portadas de las revistas y campañas publicitarias suelen ser aquellas con atributos físicos más cercanos a los caucásicos. Nyong’o, de tez oscura como el azabache, pelo corto y sin extensiones, rompe moldes.
La actriz también ha conquistado corazones arriba y abajo de las pasarelas. La diseñadora Miuccia Prada lleva un tiempo rendida a sus pies. La creadora italiana la ha escogido como imagen de Miu Miu y confeccionó especialmente para ella el vestido de Prada en tonalidad “azul Nairobi” con el que Nyong’o subió a recoger la estatuilla el pasado marzo. Un verdadero hito para una firma que el año pasado contrató a una modelo negra para sus campañas por primera vez en casi 20 años y que de 1993 a 2008 no usó ninguna en sus desfiles.
Todos quieren formar parte del fenómeno Lupita, sobre todo después de comprobar que el bálsamo de labios que llevó a los Oscar prácticamente se agotó después de aparecer en pantalla. Todavía no está claro si su recién estrenada visibilidad le procurará buenos papeles, pero su objetivo prioritario es ejercer de inspiración para las jóvenes. Durante la entrega de premios en la asociación de mujeres negras en Hollywood leyó un fragmento de una carta escrita por una adolescente de raza negra a la que el éxito de la intérprete disuadió de utilizar un producto para blanquearse la piel.
El ascenso de Nyong’o a chica del momento ha sido meteórico. Antes a batir a un millar de aspirantes y hacerse con el papel de Patsey en 12 años de esclavitud era una actriz prácticamente desconocida que completaba sus estudios de interpretación en Yale. Su nominación al Oscar que posteriormente se llevó a casa la colocó en el punto de mira mundial. Durante los cuatro meses que dura la temporada de premios pisó 65 veces la alfombra roja. Sus coloridos vestidos, en especial el rojo de Ralph Lauren de los Globos de Oro, la coronaron como la más estilosa de Hollywood y provocaron que marcas como Dior, Calvin Klein y Gucci se pelearan por vestirla. Curiosamente, varios de ellos estaban en la lista de diseñadores que contratan a pocas modelos no blancas publicada por la organización fundada por las tops Iman y Naomi Campbell para combatir el racismo en las pasarelas. Campbell se refiere a Nyong’o como una nueva actriz “a la que mirar con orgullo”. Mientras tanto, los activistas esperan que la fiebre Lupita no se quede en una moda de unos pocos día. Que no sea la excepción que confirme la regla.
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