España país de genios y mediocres
De acuerdo con el informe PISA, España sigue por debajo de la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Cada año es agotador ver cómo España sigue ocupando un puesto lamentable en Matemáticas y otras asignaturas. La pregunta es evidente, ¿quién tiene la culpa de esta mediocridad? ¿Los padres, los profesores, la sociedad, la mala educación, los malos libros?
¿Cómo puede ser que estos dos pretendidos partidos políticos españoles que copan los votos no sean capaces de acabar con este desastre educativo? En mi opinión, todos tienen culpa. El otro día estaba viendo un partido de fútbol de niños de siete años y algunos de los padres del equipo rival insultaban a sus propios hijos porque perdían. Evidentemente, estos padres se han perdido la primera clase de la sociedad: el respeto. Es decir, son analfabetos sociales. ¿Qué tipo de padre es este? ¿Cómo puede luchar un profesor o la sociedad contra este grave problema? Solo hay una forma: concienciar a la sociedad española de que si crías patatas no puedes recoger luego zanahorias. La concienciación tiene que ser diaria y el Gobierno debe usar todos los recursos necesarios para ello. No hacerlo es miopía social. Cualquier estudiante que no deja los estudios tempranamente o que incluso suba su nota un 1% es una buena inversión. ¿Realmente es necesario, para obtener estos resultados mediocres, machacar los bolsillos españoles cambiando el contenido de los libros escolares de año en año? Debemos actuar con un plan cultural que nos coloque donde nos merecemos. Pero ¿cómo va a ocurrir esto cuando el Gobierno invierte cada vez menos en Educación? Es necesario que desde los medios de comunicación se difunda la idea de que la meritocracia es la solución para avanzar el día de mañana en el difícil mundo de la vida. Políticos y deporte deberían dar ejemplo, en lugar de hacer lo contrario.— Luis Mariano Moreno Écija.
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