Cayetano Rivera, otra ‘víctima’ de ‘El Hormiguero’

Cayetano Rivera Ordóñez fue operado la noche del martes de una fractura de peroné que se produjo el pasado lunes durante su participación en el programa El Hormiguero de Antena 3. No es el primer percance que se da en el programa. Parte del pelo de Boris Izaguirre se quemó durante una prueba y el propio Pablo Motos, el presentador, sufrió un golpe en la cara que le tuvo varios días amoratado. La semana pasada también hubo momentos de tensión cuando un equipo alemán se propuso elevar en el aire a una chica mediante dos pequeños helicópteros pero uno de los aparatos perdió el control y se estrelló contra el suelo.

El torero retirado y actual modelo lo anunció por sorpresa en su cuenta de Twitter, en la que escribió: "La intervención ha ido fenomenal; muy pronto os vamos a contar más cosas, ¡gracias por estar pendientes!". Este mensaje estuvo precedido por la sorprendente noticia de su lesión. "Hola a todos", decía Cayetano, "anoche me fracturé el peroné; ahora entro en quirófano para acelerar la recuperación y continuar con el proyecto Fundación Yo Niño".

El accidente se produjo cuando el torero y Pablo Motos, competían en una prueba física consistente en avanzar con la ayuda de los brazos, colgados de una estructura metálica, al estilo de una instrucción militar. Cayetano no pudo finalizar el ejercicio por un fallo técnico y se dejó caer sobre una lona desde una considerable altura.

Al parecer, el choque contra el suelo le produjo la lesión, si bien el torero no mostró ningún signo de dolor y continuó con el tono desenfadado del programa. Tanto es así que, una vez finalizado, escribía en su cuenta de Twitter: "Muy divertido el programa, muchas gracias al equipo por el buen rato".

Cayetano Rivera, que está retirado de los ruedos desde el mes de octubre de 2012, había acudido a la televisión para hablar de su proyectada vuelta al mundo, que pretendía comenzar el próximo 7 de abril, y que es una de las actividades de la Fundación Yo Niño, creada por él mismo para ayudar a los niños más desfavorecidos. La expedición de momento no puede contar con él, obligado a guardar reposo tras se operado por el doctor Ángel Villamor, uno de los médicos del Rey.