El análisis final de la dinamita del 11-M demuestra sin lugar a dudas que era igual a la robada en Asturias
El estudio demuestra que el explosivo es Goma 2 ECO y tira por tierra la tesis clave de los defensores de la conspiración
La Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que es la que juzga los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, ha distribuido hoy a las partes personadas en el proceso el último informe pericial realizado sobre los explosivos supuestamente usados por los terroristas y hallados en las pesquisas policiales. El estudio, que firman siete de los ocho expertos del equipo, deja claro que la cantidad de dinitrotolueno (DNT) encontrada en los escenarios de la investigación no supera en ningún caso el 0,0088%. Lo bajísimo de este porcentaje deja meridianamente claro que la dinamita usada fue Goma 2 ECO, que durante su proceso de fabricación sufrió algún tipo de contaminación con DNT, posiblemente en la misma factoría. La Goma 2 ECO fue robada en Asturias y suministrada a los autores materiales de la matanza. De este informe se deduce que no se empleó otro tipo de dinamita (por ejemplo, Titadyne, la empleada habitualmente por la organización terrorista ETA), puesto que en ese caso el porcentaje de DNT sería muy superior.
De los ocho peritos, dos pertenecen a la Policía Nacional, otros dos a la Guardia Civil y los cuatro restantes a tres acusaciones particulares (dos de ellas en nombre de asociaciones de víctimas que ponen en cuestión la investigación judicial y policial y defienden la teoría de la conspiración, es decir, la posibilidad de que ETA esté implicada en la matanza) y a uno de los principales acusados del atentado, Jamal Zougam, al que se considera autor material del ataque.
El análisis conocido hoy es cuantitativo, no cualitativo, es decir, precisa no sólo las sustancias encontradas, sino en qué porcentaje se halla cada una de ellas. No incluye los restos de explosivo hallados en los trenes “por no disponerse de muestras para su análisis”. O sea: se ha analizado lo encontrado en el piso de Leganés donde se suicidó parte del comando islamista poco después de la matanza; en las vías del tren AVE contra las que quisieron atentar antes; en el municipio toledano de Mocejón; en la furgoneta con la que se trasladarón a la estación de tren de Alcalá de Henares; y en la bomba que no explosionó. En tres de las muestras (dos de Leganés y la del AVE), no había ni rastro de DNT.
El informe descarta definitivamente una de las teorías en las que basan todas sus sospechas los defensores de una conspiración en torno al 11-M, en la que habrían participado policías, guardias civiles y servicios de información españoles y extranjeros. Complementa además el informe cualitativo, en el que todos los componentes de la Goma 2 ECO aparecieron en los restos de dinamita no explosionada hallados en los diversos escenarios utilizados por los terroristas. A esos componentes se añadió el DNT, lo que generó alguna duda sobre el explosivo usado, pues en la composición de la Goma 2 ECO no aparece el DNT. El nuevo informe diluye estas sospechas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.