El fisco vigila la boda de Carlos y Camilla
El príncipe heredero debería pagar 30.000 euros de impuesto por el anillo de compromiso, según 'Daily Express'
La boda del príncipe Carlos de Inglaterra y de Camilla Parker-Bowles ha sido analizada por la prensa británica desde casi todos los puntos de vista posibles: como una larga historia de amor, como el escándalo que puede sacudir la institución monárquica, como el fenómeno mediático del año... Faltaba la perspectiva fiscal del asunto y ahí quizá la Hacienda Pública británica tenga algo que decir.
Según publica hoy el diario Daily Express Carlos de Inglaterra debería pagar la nada desdeñable cantidad de 30.000 euros en concepto de impuestos por el anillo de compromiso de su prometida para no infringir la legislación sobre sucesiones. El motivo es que la sortija, que heredó de su abuela la Reina Madre, ha ido a parar a una persona con la que, de momento, el príncipe no tiene parentesco cercano.
Según el diario la única solución que le queda a heredero británico para eludir el pago del llamado Impuesto de Bienes Gananciales es acordar con Camilla que en caso de que su matrimonio fracase, la futura duquesa de Cornualles devuelva la alianza, valorada en más de 750.000 euros.
Pero no es ese el único impuesto que, según los incisivos redactores de Daily Express debe pagar Carlos. Los expertos citados por el diario estiman que la sortija de oro y platino ha aumentado su valor en unos 75.000 euros desde la muerte de la Reina Madre en 2002, un incremento del que los herederos de la pieza están obligados a pagar cerca de un 40%.
El preciado anillo de estilo Art Déco fue un regalo del rey Jorge VI de Inglaterra a su esposa Isabel, la Reina Madre, como símbolo de su amor y fue la pieza de joyería más valiosa que ella llevó después del anillo de bodas. La boda de Carlos y Camilla, si el fisco finalmente no lo impide, se celebrará el próximo 8 de abril en el Ayuntamiento de Windsor.
