El Príncipe y Letizia Ortiz escuchan por primera vez 'Música para una boda'

El Príncipe de Asturias ha recibido esta mañana con "alegría y orgullo" la Medalla de Honor de Madrid en un pleno extraordinario celebrado en la Casa de la Villa al que ha acudido acompañado por su prometida, Letizia Ortiz. Tras recibir esta distinción, ha dedicado unas palabras de recuerdo a las víctimas de los atentados del 11-M y ha señalado que espera compartir "con toda España" su próximo enlace matrimonial. Por último, la pareja ha escuchado por primera vez Música para una boda, una sinfonía compuesta por Nacho Cano y con la que el Consistorio ha querido agasajar a los novios.

El heredero de la Corona y su novia, vestida con chaqueta clásica blanca y falda color crema, han llegado a la plaza de la Villa a las 12.00 y han sido recibidos por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, que ha acompañado al Príncipe mientras pasaba revista al Escuadrón de Caballería de la Policía Municipal. Después de los saludos, han pasado al Salón de Plenos, donde don Felipe ha ocupado el lugar principal, su novia a la derecha y el alcalde a su izquierda. Ante la corporación, Don Felipe ha asegurado que "el deber y el compromiso con la vida nos exigen que sigamos adelante", en referencia a los atentados y a la cercanía de su enlace, el 22 de mayo. Durante su discurso, se ha referido en varias ocasiones al 11-M, una "tragedia" en la que "el mundo entero pudo comprobar la valía de un pueblo que no se abandonó a la desesperanza".

"Un sentimiento contradictorio nos embargó a muchos madrileños ese día: el de sentirnos orgullosos de ser parte de esta ciudad, al tiempo que un profundísimo dolor hacía mella en nuestro ánimo", ha destacado Don Felipe. El Príncipe también ha recordado unas palabras que ya pronunció durante su visita institucional a la comunidad hace tres años: "Mi satisfacción por encontrarme en esta casa de todos los madrileños, auténtico corazón de la villa en la que he nacido, he cumplido etapas fundamentales de mi formación, y también en la que vivo, y ahora, puedo añadir, en la que deseo formar pronto una familia". "El reconocimiento del que me habéis hecho objeto y que os agradezco muy sinceramente acentúa esa íntima satisfacción y entraña una nueva responsabilidad dentro del compromiso que, como heredero de la Corona, he asumido", ha continuado.

UN VÍNCULO INSTITUCIONAL Y PERSONAL

Don Felipe ha alabado la "personalidad, el carácter de fructífera encrucijada y la capacidad de síntesis" de Madrid, elegida por él y por su prometida para celebrar su enlace "porque el vínculo que esta ciudad mantiene con la Corona reviste para nosotros una naturaleza que, más allá de lo institucional, es también de personal". "Sabemos que en Madrid estamos cerca de todos los españoles y que aquí podremos sentirnos acompañados por todos ellos", ha subrayado. Por su parte, Ruiz-Gallardón ha señalado, tras imponerle la máxima condecoración que ofrece la ciudad, que este reconocimiento representa "la esperanza de una ciudad que quiere resurgir" y que el próximo día 22 demostrará al mundo "que la embestida del terror y la cerrazón no ha conseguido desnaturalizarnos".

"Hoy, cuando una agresión irracional acaba de causarnos la pérdida más dramática que Madrid ha padecido en décadas, necesitamos poder mirar hacia adelante, en la esperanza de que un ideal elevado de convivencia como el que Madrid siempre quiso promover, y como el que la Corona ampara mediante la Constitución, podrá garantizarnos la paz, la justicia y la seguridad", ha añadido el alcalde, que ha finalizado su intervención dando a los novios la "enhorabuena" en nombre de los ciudadanos de Madrid.

Tras este acto, don Felipe y Letizia Ortiz, junto a los concejales madrileños y otras 200 personas invitadas, que han seguido el pleno a través de pantallas desde un salón contiguo, el Patio de Cristales, se han trasladado a una carpa montada en la explanada de la calle Sacramento. Allí, han asistido al estreno de la composición de Nacho Cano Música para una boda. El compositor y la Orquesta Sinfónica de Madrid han interpretado la sinfonía, que tiene una duración de nueve minutos y que ha sido ofrecida como regalo del Ayuntamiento a los novios.