Euskaltel rebaja su perfil político
La jubilación de José Antonio Ardanza, deja a García Erauzkin, un gestor profesional de la casa para pelear en un mercado lleno de incertidumbres
La operadora de telecomunicaciones vasca, Euskaltel, comienza hoy una nueva etapa con Alberto García Erauzkin al frente de la compañía. Aunque ya era el primer ejecutivo cuando el exlehendakari José Antonio Ardanza ejercía de presidente, el salto hasta la presidencia ejecutiva va a consolidar el viraje de la telefónica que arrancó su modelo de negocio ligado al poder nacionalista hacia otro más estrictamente empresarial y competitivo en un País Vasco cada vez más fragmentado política e institucionalmente.
La confirmación de García Erauzkin por el consejo de administración y la junta general de accionistas, es un espaldarazo a la gestión de un equipo que, a falta de conocer los datos relativos a este 2011, el último balance presentado, el de 2010, deja un saldo positivo y un crecimiento superior al del sector.
Las cajas deberían ampliar capital si hay que pagar 222 millones a Orange
Euskaltel ha conseguido mantener su trayectoria saneada, incluso en medio de la crisis, acreditando crecimientos continuados a lo largo de toda su historia empresarial. Mientras el resto del sector de las telecomunicaciones acumulaba unas caídas cercanas al 8% desde 2008 hasta 2010, la compañía vasca ha sido capaz de crecer por encima del 2% en ese periodo.
El pasado año, logró unos beneficios de 32,7 millones de euros y es líder de banda ancha en Euskadi, así como de televisión digital de pago, aunque en este caso con algunos matices. Además, está a la cabeza en telefonía fija en las zonas en las que tiene desplegada su red de fibra óptica en Euskadi.
Pero eso es el pasado. El presente y el futuro están plagados de incertidumbres y problemas con los que este licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Deusto va a tener que lidiar a partir de mañana mismo.
En un contexto de grandes operadoras de telefonía que se reparten el mercado a base de enormes campañas de publicidad y ofertas globales, Euskaltel tiene que afrontar su principal talón de Aquiles, la telefonía móvil, cuyo servicio presta ahora a través de Vodafone. Un segmento del negocio que difícilmente va a poder prestar con su propio sello debido a las enormes inversiones que debería afrontar, aunque, finalmente, el nuevo Gobierno decida fragmentar hasta el nivel comunitario las nuevas frecuencias para móvil. Y eso que el pasado abril, el exparlamentario nacionalista Xabier Ormaetxea entró en la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) tras el acuerdo logrado entre el PNV y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. La misma telefonía móvil que ya le ha dado disgustos como la indemnización de 222 millones que la Corte Internacional de Arbitraje quiere que Euskaltel pague a Orange -propiedad de France Telecom y heredera de Amena- por los supuestos daños ocasionados tras romper relaciones a mediados de 2006. El tema sigue abierto en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.
Una cantidad que, en caso de tener que pagar tendrían que soportar sus accionistas. El 67% de Euskaltel está en manos de las tres cajas vascas que en enero empezarán a operar con sus participaciones industriales como Kutxabank. Las cajas, más partidarias de desinvertir parcialmente que de ampliar capital, se verían obligadas a esta aportación de confirmarse el laudo
Un 'korrikalari' para una firma ligada al ciclismo
Seguramente Alberto García Erauzkin, un hombre consecuente consigo mismo habrá salido también hoy a correr por Algorta a eso de las seis de la mañana. Y seguramente lo habrá hecho sin móvil. Al fin y al cabo los siete kilómetros que recorre a base de zancadas dos o tres días por semana, serán casi con toda seguridad los únicos 45 minutos que tiene para estar consigo mismo, y darle vueltas a los problemas del día, de la semana o del mes.
Posiblemente a falta de unas horas para ser nombrado presidente ejecutivo de Euskaltel habrá hecho un repaso de su trayectoria profesional, desde los tiempos de Arthur Andersen y se habrá preguntado cuál será el próximo destino que le va a deparar el futuro, aunque inmediatamente se habrá sumergido en los retos que tiene todavía por delante una compañía quizás demasiado pequeña para afrontar un momento crucial del sector en el que otras operadoras pequeñas como la asturiana Telecable y la gallega R, con la que comparte alianzas en el exterior, han buscando aliados financieros para superar el momento y crecer tecnológicamente.
García Erauzkin ha dejado ya el sello de su gestión, tanto hacia dentro como hacia fuera. Ha innovado con su participativo sistema de comunicación interna, desayunando con sus empleados -553 en total, pero en tandas de 25- de forma periódica para atender a sus dudas, y hacia fuera con un sistema de atención al cliente alejado de la impersonalidad de los teleoperadores.
También tiene en su haber el modelo arriesgado pero divertido y eficiente de comunicación y marketing publicitario, y un concepto de la participación y de la transparencia que le ha llevado a acreditar que todas las decisiones estratégicas de la compañía, desde que es consejero director general, se han tomado por unanimidad.
Ahora va a tener que apretar los dientes porque es plenamente consciente de que la franja que más está creciendo dentro del sector de las telecomunicaciones es Internet móvil.
En ese campo tiene muy poco margen de maniobra al no disponer de una licencia propia y operar como una compañía virtual bajo la autorización de Vodafone. Esa hipoteca les limita para llegar acuerdos con fabricantes de terminales y hacer ofertas exclusivas conjuntas de smartphones, que parecen ser la prioridad de los clientes nuevos. Ahora sí que puede distribuir el Iphone de Apple a unos precios algo más elevados que la competencia, y también las Blackberry.
También tiene que resolver el problema de la expansión en otras zonas geográficas que de momento no le están dando los resultados que esperaba ni en Navarra ni en Levante, posiblemente por no poder plantear ofertas globales.
Metódico y calmado, dominador del castellano, euskera, inglés y francés, el nuevo presidente de Euskatel es un korrikalari de fondo, pero tendrá que decidir si sigue apoyando al deporte de las dos ruedas.
Perfil profesional
- Alberto García Erauzkin, (1960, Erandio, Bizkaia)
está casado y es padre de dos hijos. Licenciado
en Ciencias Económicas
y Empresariales por la Universidad de Deusto, es miembro del Registro Oficial de Auditores
de Cuentas y del Instituto de Auditores-Censores Jurados de Cuentas; en concreto, en Arthur Andersen y Audihispana (1983-1987 y 1990-1992),
y en el campo de la gestión en Heraclio Fournier (1987-1990) y en la Corporación Patricio Echevarría (1992-1997). Desde 1998 trabaja en Euskaltel, primero como director de Finanzas y Control (1998-2000), y después como consejero director general. Es consejero de la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), representante
de Euskaltel en el
Instituto Vasco de Competitividad,
y miembro de la junta directiva de Innobasque.
