"Una obra de arte total"

El director artístico del Teatro de la Maestranza de Sevilla, Pedro Halffter, definió ayer la ópera La Valquiria, de Richard Wagner, como "una obra de arte total". La Valquiria, segunda ópera de la tetralogía El anillo del Nibelungo, se representará en el Maestranza los días 11, 14, 17 y 20 de noviembre. Halffter es el director musical de la ópera, coproducida por el Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia y Maggio Musicale Fiorentino. Carlus Padrissa, miembro fundador del grupo La Fura dels Baus, es el director de escena.

La Valquiria es la segunda obra de la tetralogía wagneriana que el Maestranza desarrolla junto a La Fura dels Baus. Con este grupo representó el año pasado El oro del Rin, primera ópera de El anillo de los Nibelungos. El elenco de La Valquiria está formado por el tenor José Ferrero (Siegmund); el barítono Michael Volle (Wotan); la soprano Petra Lang (Sieglinde); la soprano Evelyn Herlitzius (Brünnhilde), y la contralto Iris Vermillion (Fricka). La Valquiria fue estrenada en Múnich en 1870 en forma individual y como parte de El anillo del Nibelungo, en Bayreuth en 1876.

"Es un espectáculo muy complejo y muy potente", dice Pedro Halffter

Los enamorados Sieglinde y Siegmund son hijos del dios Wotan. Por ello su esposa, Fricka, solicita que sean castigados. Pero Wotan ha encargado a Brünnhilde que proteja a Siegmund frente a Hunding, marido de Sieglinde, ya que necesita de su espada. Con todo, Wotan acaba desdiciéndose y ordena a Brünnhilde que mate a Siegmund. Brünnhilde desobedece a su padre y huye con Sieglinde.

Halffter destacó ayer la puesta en escena de La Fura dels Baus, "que mezcla elementos muy básicos como los huesos y el fuego, con un universo tecnológico muy potente". "El aparato técnico es muy importante. Por ejemplo, el movimiento de las diferentes grúas. Es un espectáculo muy complejo y visualmente muy potente", dijo el director artístico del Maestranza.

Por su parte, Padrissa hizo hincapié en que su grupo se "ha remitido a lo más arcaico y primitivo". "Buscamos el arte total en el sentido en que lo quería Wagner. Me parece lo más normal que si los actores son dioses se desplacen volando. Y más las valquirias. Hay que ver la mezcla de los elementos físicos -las grúas- con los virtuales, que empiezan por la luz y el vídeo", resumió Padrissa.

Evelyn Herlitzius señaló que "se ha encontrado una buena solución para el desarrollo del personaje de Brünnhilde, que pasa de ser una adolescente muy inocente a una mujer que lo ha perdido todo en la vida". Herlitzius recordó la "especial dificultad" de su personaje. "Necesitas tener tres voces: lo más agudo al principio; luego, más bajo; y luego, cambiando de un registro a otro", comentó la soprano.

Petra Lang señaló que "el problema para interpretar a Sieglinde es mostrar a una mujer que no tiene libertad ni derechos, que vive con un marido que no la trata bien y que la primera oportunidad que tiene de que la traten mejor es salir de esa jaula".

José Ferrero destacó que Siegmund "viene como un héroe herido de una batalla y cuando conoce a Sieglinde saca unos aspectos amorosos que no conocía". "Vocalmente es un personaje muy difícil. Durante el primer acto está todo el tiempo en escena. El segundo acto es muy difícil porque requiere un registro grave que es casi baritonal", concluyó Ferrero.