Garitano desmantelará este año el 'lobby' Gipuzkoa Aurrera

El diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, apuntilló ayer el lobby Gipuzkoa Aurrera, el gran estandarte político de su antecesor en el cargo, Markel Olano, del PNV. El Gobierno foral de Bildu ha decidido dar sepultura a finales de año a este grupo de trabajo, creado en junio de 2008 y en el que participan, bajo la dirección de la Diputación, la Kutxa, Adegi, la Corporación Mondragón, la Cámara de Comercio y el Ayuntamiento de San Sebastián. Estaba cantado que con la llegada de Bildu al poder Gipuzkoa Aurrera tenía los días contados. A Garitano le ha tocado comunicar oficialmente la defunción de esta alianza público-privada, concebida para impulsar proyectos estratégicos en la provincia.

La Diputación quiere activar una "nueva dinámica de participación"

Olano: "Bildu demuestra que es más fácil destruir que construir"

El mandatario guipuzcoano explicó en una comparecencia en las Juntas Generales que la Diputación no renovará el convenio que financia Gipuzkoa Aurrera, suscrito por el anterior Ejecutivo y vigente hasta 2011. Bildu considera que el lobby ha supuesto a las arcas forales un desembolso superior a los cuatro millones de euros. La coalición independentista ha sido muy crítica con esta fórmula, porque ha supuesto "la privatización de la gestión pública". La Diputación guipuzcoana, según esta formación, ha sufrido "una pérdida de soberanía a favor del capital".

Garitano anunció que su gabinete está preparando una "nueva dinámica de participación" dentro del ámbito económico, en la que tenga cabida todos los agentes sociales y económicos. Cuando esta iniciativa esté preparada, los integrantes de Gipuzkoa Aurrera y los grupos políticos serán invitados a participar en la misma, garantizó el diputado general.

Olano, ahora portavoz del PNV en la Cámara provincial, lamentó la decisión de Garitano, pues siempre consideró que Gipuzkoa Aurrera "no lleva el sello de ningún partido" y es "patrimonio de un territorio que lleva en su ADN la palabra colaboración". Supone "un paso atrás muy importante" e ir encontra de lo que están poniendo en marcha "los países más avanzados del mundo". El ex diputado general criticó que que "es mucho más fácil destruir que construir", aunque apostilló que el Gobierno de Bildu mantiene en sus presupuestos las partidas destinadas a la mayoría de los proyectos impulsados por Gipuzkoa Aurrera.

Esta alianza ha funcionado dividida en cuatro ámbitos de trabajo: el grupo económico, liderado por Adegi; el equipo promotor de proyectos estratégicos, encabezado por la Cámara de Comercio; otro orientado a impulsar nuevos proyectos, supervisado por la Corporación Mondragón, y el grupo sobre estrategia social, pilotado por la Kutxa.

Durante sus algo más de tres años de existencia, ha estado involucrado en proyectos como el Masterplan de la bahía de Pasaia, el laboratorio de viviendas domotizadas (Living Lab), financiado por el Gobierno español; la organización del sistema biosanitario de Gipuzkoa; los planes de mejora del sistema de transporte de Gipuzkoa, o la creación de una red eléctrica inteligente.

Antes de las pasadas elecciones de mayo, la Diputación gobernada por el PNV y Hamaikabat, con la aprobación del resto de integrantes de Gipuzkoa Aurrera, decidió dotar a la alianza público-privada de forma jurídica y constituirse como una fundación. Incluso se había previsto abrir una sede propia, contratar a un director general y abrirse a la incorporación de nuevos socios. La victoria electoral de Bildu y su llegada al poder foral desbarató todos estos planes.

El PNV se quedó prácticamente solo en la defensa de este experimento. El resto de los partidos fueron muy recelosos con la fórmula porque podía escaparse del control de las instituciones.