El destino del Palacio del Sur depende del 20-N
El alcalde de Córdoba, del PP, ha paralizado el proyecto y promete un nuevo impulso si su partido gana las elecciones
El futuro Centro de Congresos de Córdoba, antes conocido como Palacio del Sur, sigue protagonizando tensos debates políticos, fuertes pulsos entre Administraciones y atrevidas promesas electorales. En sus cinco primeros meses en el poder, el nuevo Gobierno municipal del PP no ha variado esta dinámica. Y no ha tocado ni uno de los rastrojos de la parcela -hoy erial- que sus antecesores al frente del Consistorio, IU y PSOE, le reservaron para construir el edificio en la orilla sur del Guadalquivir.
Por el contrario, el PP ha preferido usar el proyecto como artillería política, reclamando más dinero a la Junta y al Gobierno para sufragar una obra presupuestada en 67 millones de euros, aunque el alcalde, José Antonio Nieto, cifra ahora las obras en unos 80 millones.
Nieto ha pactado una prórroga para las aportaciones de Junta y Gobierno
Desde que se sentó en la alcaldía en mayo, Nieto ha hecho equilibrios con dos variantes: por un lado, la cercanía de las elecciones generales y autonómicas, que podrían terminar pintando de azul un panorama político dominado por el PP lo que, según el primer edil, aseguraría mayor financiación estatal. Por otro lado, el alcalde ha tenido que pedir prórrogas de sendos convenios de financiación alcanzados por el gobierno municipal anterior (IU y PSOE) con la Consejería de Turismo y el Ministerio de Industria por valor de 18 y 10 millones de euros, respectivamente. Cuando ya iban a expirar los plazos, ha obtenido luz verde para prolongar el convenio. Aunque ello implica un nuevo calendario cerrado para unas obras que ya debían estar en marcha, según los acuerdos originales.
Por eso, la Junta ya mete prisa a José Antonio Nieto. El consejero de Turismo, Luciano Alonso, ha aceptado por escrito todas las nuevas exigencias que el Ayuntamiento incluyó en su petición de prórroga. Pero, a su vez, Turismo solicita un calendario cerrado sobre el inicio y finalización de las obras, además de plazos de justificación y un nuevo cuadro de financiación. El anterior Gobierno, liderado por Andrés Ocaña (IU), dejó todo listo para meter las máquinas e iniciar las obras, con un cronograma incluido. La hoy oposición, IU y PSOE, sostiene que las obras ya podrían haber comenzado al haber financiación suficiente.
Pero el PP no se da por aludido. El portavoz del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Córdoba, Miguel Ángel Torrico, se limita a valorar que la Junta haya aceptado "ampliar y modificar" el convenio firmado con el Consistorio. Pero ni hablar de fechas concretas para iniciar las obras. Por el contrario, se insiste en verter dudas sobre la cuantía final que aportará el Gobierno regional. "La duda es qué pasará si el proyecto se adjudica por una cuantía menor a la presupuestada. ¿Afectaría esa baja de alguna manera a la ayuda actual de 18 millones de euros prometidos por la Junta? Si se deja la puerta abierta a inversores públicos o privados, debería repercutir en la aportación del principal socio, el Ayuntamiento, y no en que se disminuya la cantidad de la Junta", dijo Torrico a Europa Press.
Nieto y su equipo siguen mirando más allá de las elecciones de noviembre y marzo. Y como en la pasada campaña de las municipales, prometen mayores inversiones autonómicas y centrales en caso de que gobierne su partido en estas Administraciones. Nieto aseguró la semana pasada que el modelo aplicado para financiar el Palacio de Congresos de León, con un coste similar al de Córdoba, es el apropiado. Y pidió que tanto el Estado como la Junta de Andalucía traten a su ciudad "con justicia y con los mismos derechos que los de otras localidades".
Según informó, la construcción del Palacio de Congresos de León contará con una financiación de un 40% por parte del Estado, un 40% de la Junta de Castilla León y un 20% del Ayuntamiento de León. "Es eso lo que pedimos", dijo. El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, avaló las palabras de Nieto. Tanto él como el líder del partido, Mariano Rajoy, han insistido, en diferentes visitas a Córdoba, sobre la necesidad de construir el futuro Centro de Congresos.
En su origen, hace una década, el Palacio del Sur iba a ser un enorme centro de congresos con auditorios, un hotel de lujo y un centro comercial, obra del arquitecto holandés Rem Koolhaas, ganador del Pritzker. La entonces alcaldesa de Córdoba y actual ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Rosa Aguilar, llegó a viajar a Nueva York para presentar los planos y maquetas de aquel icono vanguardista que quería representar a la Córdoba del siglo XXI.
Si bien, en teoría, no iba a costarle un euro al erario municipal gracias a una vanguardista forma de financiación por la que la ciudad ponía los terrenos y la empresa constructora lo explotaría durante décadas, el proyecto ha terminado siendo carísimo. Las continuas demoras provocadas por cambios de ubicación del edificio (Koolhaas forzó que se cambiase el PGOU para que su obra luciese vistas a la Mezquita), unido a cómo se disparó el presupuesto final y al abandono del constructor elegido, Ferrovial, provocaron que se terminase diseñando un proyecto más modesto, pequeño y algo más barato. A costa de pagar, solo por las maquetas y el descampado sobre el que se levantará algún día el palacio, más de nueve millones de euros de dinero público. Pero, por el momento, no están hechos ni sus cimientos.
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