El exgerente de Emarsa contrató personal que solo iba allí "a cobrar"

Esteban Cuesta, dirigente del PP en la ciudad de Valencia y exgerente de Emarsa, la sociedad pública de depuración del agua, declaró ayer ante el juez que contrató a cuatro personas "que no iban por la planta, ni nadie les vio por allí y que solo venían cuando tenían que cobrar". Cuesta declaró ante el juez que se hizo con los servicios de los cuatro por indicación del vicepresidente de la Diputación de Valencia y alcalde de Manises, Enrique Crespo, a quien el fiscal ha pedido imputar por los supuestos delitos de malversación, estafa continuada y delitos societarios en el caso que investiga el saqueo de la empresa pública.

Una de las personas contratadas, dijo ayer Cuesta, era periodista y había sido la jefa de gabinete en el Ayuntamiento de Manises. Otra era Luis Botella, concejal de Urbanismo en Moncada con el PP y abogado. Una tercera era también abogada (y de Manises) y de la cuarta no supo ni los apellidos ni el oficio. Ninguno de ellos hizo ningún trabajo para Emarsa que él recordara.

La sociedad pública quebró el año pasado y fue disuelta por el PP con un agujero de 17 millones de euros tras haber pagado por servicios y suministros que en algunos casos parecen sospechosos y en otros, imposibles. Cuesta ha apuntado al alcalde de Manises como instigador del saqueo sistemático, aunque no precisamente refinado, de la sociedad.

Ayer, a preguntas de las acusaciones particular y popular, declaró que el cargo de gerente se lo ofreció Crespo en 2004 en su despacho de alcalde de Manises. Se lo ofreció a pesar de que Cuesta no tenía ninguna experiencia en el campo de la depuración de aguas (es enfermero de profesión), ni de la gestión, ni de la contabilidad. Y que lo más cerca que había estado nunca de las instalaciones de Emarsa, en Pinedo, había sido almorzando en un bar de al lado "muchos años antes".

También afirmó que cuando llegó a su despacho el primer día estaban allí Crespo e Ignacio Martínez, que era jefe de compras de la sociedad pública y sigue siendo secretario general del PP en el distrito de Trànsits, en Valencia. Y que ambos le explicaron que él tenía que seguir con el equipo directivo que heredaba, sin hacer cambios. Cuesta también afirmó que algunas veces el propio Crespo se pasaba por Emarsa y se llevaba por sí mismo los artículos de lujo y regalos que ordenaba comprar a costa de las arcas de la sociedad. El exgerente añadió que en un primer momento sus poderes en Emarsa estaban limitados, y que tiempo después el asesor jurídico de la empresa le informó de que esa limitación había sido levantada.

El juez Vicente Ríos acordó requerir a la Emshi, la entidad pública de la que dependía Emarsa, los contratos de los cuatro supuestos enchufados. Ríos, según se supo ayer, contará con un juez de refuerzo en su juzgado para dedicarse en exclusiva al caso Emarsa.