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Tentaciones
Entrevista:PUBLICACIONES

La Anna Wintour de lo alternativo

"Disfruto de la vida, pero jamás me lo pongo demasiado fácil". Jane Pratt, la mítica editora de Sassy y Jane, es uno de los personajes del universo mediático estadounidense más ubicuos, polémicos y significativos. Tras unos años agazapada en el universo radiofónico, dando y recibiendo consejos en un programa de la reputada Sirius FM, la periodista y estilista de 48 años ha decidido volver a editar un medio escrito. Esta vez se trata de un blog. Se llama xoJane y es, Marc Jacobs nos coja confesados, su aventura más personal. Y eso es mucho proviniendo de una mujer que le puso a su segunda aventura editorial su nombre de pila y sacó en portada en el primer número a una actriz (Drew Barrymore) con la que mantenía una relación sentimental.

"Yo revelo temas superpersonales; miscolaboradoras, también. Es un reto liberador"

En plena década de los noventa, Pratt revolucionó el universo de las publicaciones dedicadas a las adolescentes con Sassy, una revista que, en vez de celebrar las virtudes de Backstreet Boys, informaba sobre la significación cultural y emocional de Sonic Youth -en su primer número regalaba un flexidisc con una versión de la banda de Personality crisis, el clásico de New York Dolls- y que, de alguna manera, inventó el exhibicionismo pop como modo de crear empatía editorial. Jane se convirtió en un personaje ubicuo, con amigos famosos como Michael Stipe e invitada regular en cualquier programa de televisión que quisiera averiguar en qué andaban las hijas de sus televidentes.

Hace 15 años, lograr que un colaborador empatizara con su audiencia mediante la pornografía sentimental tenía un precio. Hoy la Red está plagada de gente que colabora gratis en la confección de su propia biografía online. "Mis bloggers cobran", interviene la editora ante la incongruencia que puede suponer pagarle a alguien por que te narre cómo su violador le pidió amistad en Facebook cuando, seguramente, lo iba a contar igualmente en su propio espacio en la red social. "Queremos tener temas personales", insiste Pratt, quien en su primer post para su nuevo medio hablaba de dos empleadas de una sala de masajes que lograron hacerla llorar al comentar a sus espaldas que parecía vieja, y cómo tuvo que llamar a Michael Stipe para contarle lo sucedido. "Los sitios de interés general, e incluso los de moda, son buenos con las noticias. No es que nosotros no queramos tener noticias, solo que queremos las nuestras, y son las personales las que nadie más puede tener. Yo misma revelo temas superpersonales. Al menos, no pido a las colaboradoras que lo hagan mientras yo me corto. Es un reto, pero también es algo liberador".

En el blog existe una sección con "las cosas de Jane" y otra que simula introducirse en su iPhone. De alguna manera, que Pratt trate ahora de institucionalizar y convertir en producto mediático el exhibicionismo online entronca a la perfección con sus anteriores aventuras editoriales. Después de todo, Sassy ponía en negro sobre blanco el imparable ascenso de lo alternativo mientras que Jane, en plena era del patrocinio de la revolución, era el claro ejemplo de la conversión de lo indie en marca universal al cobijo de una multinacional. "Aún hay gente que se me acerca y me cuenta lo mucho que Sassy significó para su vida. Es curioso cómo lo que te afecta en tu adolescencia se queda contigo toda la vida. Jamás voy a tratar de emular lo que logré con esa revista, pero es una bendición mantener parte de ese público".

Como en el caso de Sonic Youth, parece poco probable que nadie se acerque de aquí a unos años para confesarle que su actual aventura, de la que la propia autora destaca elementos tan revolucionarios como "tratar temas de ciencia y deportes, algo que no asociarías normalmente al público femenino; ser positivos y no juzgar", cambió su vida. Pero Pratt gestiona su nueva realidad con el desahogo de quien una vez reclutó a Spike Jonze, hizo callar a Howard Stern, rajó de las Spice Girls en el programa de Oprah o se atrevió a polemizar con un gigante editorial del tamaño de Condé Nast. Fue la Anna Wintour [todopoderosa directora de Vogue USA] indie en una era en la que eso podía ser rentable. Hoy es una señora mayor rodeada de jóvenes blogueros con mejor cutis y acosada por hordas de comentaristas online sedientos de sangre y vísceras. A pesar de todo, como siempre, Pratt se lo toma con humor. "Cuento con Tavi [Gevinson, una de las blogueras de moda más de moda y más jóvenes del mundo] como colaboradora y el otro día fui a un desfile de Rodarte con ella. Una chica se nos acercó y me pidió que les sacara una foto juntas. Debió pensar que era su madre". No iba tan desencaminada.

<b>Jane Pratt, editora de las revistas <i>Sassy</i> y <i>Jane,</i>y ahora responsable del blog xojane</b>
Jane Pratt, editora de las revistas Sassy y Jane,y ahora responsable del blog xojane
<b>Una portada con Kurt Cobain y Courtney Love de <i>Sassy,</i> la primera revista de Pratt.</b>
Una portada con Kurt Cobain y Courtney Love de Sassy, la primera revista de Pratt.
<b>Un simple vistazo a los titulares de la nueva web de Jane Pratt,<i> xoJane,</i> prueba que no estamos ante un producto femenino convencional: "Mis tatuajes hacen creer a los hombres que soy una chica fácil", "Mi violador me ha pedido amistad en Facebook"...</b>
Un simple vistazo a los titulares de la nueva web de Jane Pratt, xoJane, prueba que no estamos ante un producto femenino convencional: "Mis tatuajes hacen creer a los hombres que soy una chica fácil", "Mi violador me ha pedido amistad en Facebook"...

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