El PP ultima su plan de reforma fiscal

El PP está ultimando la propuesta de reforma fiscal que pretende cerrar la próxima semana para remitirla al Gobierno, el PSE y el PNV, y abrir el debate sobre las mejoras tributarias que cree precisas para hacer frente a la recesión. Mientras los socialistas apuntan en el conjunto de España y en Euskadi a la necesidad de subir impuestos, el plan de los populares incluye un nuevo descenso de entre tres y cuatro puntos en el Impuesto de Sociedades, el aumento en el límite exento de declaración del IRPF, ahora situado en 12.000 euros, y mejoras en la tributación de la renta para autónomos y pensionistas, entre otras cuestiones.

Los populares han defendido siempre que las empresas deben tributar menos por sus beneficios. Ahora apuestan por un nuevo descenso del Impuesto de Sociedades, después de que a finales del año pasado se recuperase la unidad sobre el mismo en las tres provincias, tras la polémica en que se embarcaron los nacionalistas en la Diputación de Guipúzcoa durante casi dos años. El PP propondrá en concreto bajar el tipo general del impuesto del actual 28% al 25%, y del 24 al 20% para las pymes, según las fuentes informantes.

El PP pretende tener cerrada su propuesta la próxima semana

"Sabemos que hay quien no entendería ahora un descenso muy fuerte, pero tenemos que irnos aproximando al tipo medio europeo", apunta uno de los dirigentes populares que están trabajando en la materia. "El problema actual de las empresas no es pagar un poco menos, sino tener beneficios, pero lo que queremos es que, cuando llegue la recuperación, se encuentren en las mejores condiciones frente a las firmas de otros países europeos, que son con las que competimos", añade.

Respecto al IRPF, en el que una serie de iniciativas aún se encuentran sometidas a debate interno, el PP quiere mejorar, por ejemplo, la situación de los autónomos, adecuando su actual tributación por módulos (pagar por lo que se presume que han facturado) a la caída de la economía. Así, podrían acogerse de forma extraordinaria incluso a la estimación directa (pagar por lo que realmente han ingresado). Otro planteamiento para este sector pensado por los populares pasa porque tengan más fácil deducirse los créditos incobrables. A ello se sumaría también elevar el límite a partir del cual un ciudadano o una empresa tienen que presentar avales para poder solicitar un aplazamiento en el pago de sus impuestos (actualmente, 6.000 euros en Vizcaya y 10.000 en Álava, y diversos supuestos en Guipúzcoa).

Otro punto que incluirá previsiblemente la propuesta es la eliminación completa de la tributación por el IRPF de las pensiones públicas contributivas (jubilación, orfandad o viudedad son las principales). Mientras, están todavía sin cerrar de forma definitiva las medidas para mejorar las deducciones de carácter familiar o la revisión en los tramos de la tarifa para acercarlos a la estructura del impuesto en territorio cómún.

La intención del PP es abrir el debate público de su iniciativa -"nosotros se lo vamos a plantear a los vascos", recalcan las fuentes informantes- al tiempo que se la trasladan al Gobierno para que la analice de cara a la próxima reunión del Órgano de Coordinación Tributaria (OCT), el foro en que el Ejecutivo y las tres diputaciones se sientan a hablar de impuestos.

A la vez, el PP se la hará llegar al PSE y el PNV -el partido que controla las tres diputaciones, que son las que tienen al final las competencias tributarias- para una posible negociación. Populares y peneuvistas no han vuelto hablar de impuestos desde la reunión que mantuvieron el pasado 27 de julio dentro de la ronda de contactos abierta por el partido de Iñigo Urkullu sobre su propia propuesta de estabilidad económica. "Entonces sólo nos preguntaron cómo veríamos una subida del IVA, pero ahora parece que prefieran que lo suba Zapatero", indica un mandatario popular presente en esa reunión. El PP todavía no ha recibido una cita para reunirse con los nacionalistas en la segunda ronda negociadora de esta formación.

La propuesta fiscal del PP está siendo elaborada por una comisión en la que trabajan ocho responsables del partido especializados en economía y coordinados por su portavoz en las Juntas Generales alavesas, Javier de Andrés.