El PP endurece sus ataques a Chaves por el plan urbanístico de Málaga

El PP elevó ayer sus críticas a la Junta de Andalucía sobre el trato que brinda a la ciudad a la categoría de confrontación institucional, con la aprobación de una singular moción en el pleno de la corporación en la que se llega a instar al presidente del Gobierno autonómico al cumplimiento de la Constitución.

En nombre del principio de la autonomía municipal, la resolución insta a Manuel Chaves a que "deje de utilizar criterios interpretativos no reglados, en muchos casos de carácter arbitrario, para pretender colocar un corsé al futuro de Málaga". También se le emplaza "al cumplimiento de los compromisos públicos asumidos de agilización de trámites para la definitiva aprobación de la planificación territorial de Málaga".

El equipo de gobierno de Francisco de la Torre está muy irritado con el informe de impacto ambiental del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) aprobado provisionalmente el 14 de agosto que declara inviable proyectos significativos que afectan a unas 8.000 viviendas. El PP ve en este rechazo una intromisión en la autonomía municipal y según De la Torre se basa en criterios de oportunidad y no de legalidad con la intención de perjudicar a la ciudad.

Crispación

En un pleno muy áspero, en el que en cada punto del orden del día se cruzaron los reproches entre PSOE y PP por sus incoherencias y sus cuentas de haberes presentes y pasadas, fueron vanos los llamamientos a la cordura del portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes, quien pidió la retirada de una moción "que sólo busca la confrontación por la confrontación y puede crear más crispación". Moreno Brenes se quejó de la utilización de medias verdades en el debate. "La autonomía local está limitada como todo, por la ley, y no se puede confundir con el derecho a hacer lo que a uno le da la gana", dijo.

El portavoz del PSOE, Rafael Fuentes, acusó a De la Torre de instalarse en el victimismo, y dijo que el informe de impacto ambiental obedece a criterios técnicos y legales que el equipo de gobierno además ya conocía y no quiso modificar en el PGOU antes de aprobarlo, en un gesto que calificó de chulería. El PSOE propuso la reprobación del concejal de Urbanismo, Manuel Díaz, por sus graves acusaciones a la Junta de los últimos días. Al edil no le importó: "Me reprueban por decir la verdad, que la Junta no quiere el desarrollo de Málaga".