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Bolín dejó en Benalmádena facturas pendientes de pago por 44 millones

El alcalde pide a la Cámara de Cuentas que le indique cómo actuar

La corporación municipal de Benalmádena constituida tras las elecciones municipales de hace un año tiene que hacer frente a pagos pendientes que superan los 44,7 millones de euros por obras y servicios contratados por el ex alcalde Enrique Bolín. Buena parte de estas prestaciones fueron encargadas por el ex alcalde de forma irregular, en ocasiones sin ni siquiera contrato ni expediente administrativo pertinente.

Hasta el momento, el equipo de gobierno tripartito que preside el socialista Javier Carnero ha constatado que no existe consignación presupuestaria para abonar 6.393.082 euros facturados al consistorio.

Carnero quiere depurar anomalías antes de acometer un plan de pagos

Junto a ellas, existen actualmente en espera de pago facturas por un importe total de 10.784.938 euros; mientras que el Ayuntamiento tiene obligaciones reconocidas por 27.594.867 euros que requerirían modificaciones de crédito para afrontarlas. Todos estos conceptos suman una deuda de 44.772.887 euros y, antes de afrontarla, el equipo de gobierno quiere conocer con exactitud su procedencia y depurarla si es posible.

La alcaldía ha iniciado un proceso de revisión de las facturas y ha encargado a Intervención un listado de todas ellas con detalle de los trabajos a los que corresponden, si se cumplimentó trámite de contratación, si existen reparos de legalidad; y comprobar después que las obras y servicios facturados se han realizado.

El actual alcalde no está dispuesto a asumir toda la deuda generada por las contrataciones directas y sin dar cuenta al pleno de su antecesor en las que no se cumplieran las exigencias legales. Según el equipo de Gobierno, en sus últimos siete meses de mandato, Bolín contrató obras por valor de 13 millones de euros.

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Carnero explica que para pagar obras y servicios contratados sin ningún procedimiento, podría utilizarse la figura del enriquecimiento sin causa, procedimiento según el cual se abonarían a los contratistas los trabajos que se comprueben que han realizado pero conforme a una valoración que realizaría el Ayuntamiento y sin beneficio industrial al no haberse seguido los cauces estipulados para la contratación.

Además, el alcalde de Benalmádena ha pedido a la Cámara de Cuentas que le dé instrucciones sobre cómo debe proceder con las facturas reparadas y los servicios contratados irregularmente. "Quiero saber hasta dónde llega mi responsabilidad", afirma Carnero, quien por un lado entiende que pagar contratos anómalos que vulneran las leyes podría implicarle consecuencias, pero también negarse a abonar trabajos realizados para el Ayuntamiento.

La Cámara de Cuentas de Andalucía ha detectado numerosas irregularidades en las adjudicaciones de obras y servicios en la etapa de Enrique Bolín. Sólo en el ejercicio 2005, el auditado por la Cámara, el consistorio asumió facturas por 21,8 millones de euros que habían sido reparadas por la Intervención municipal por anomalías como la inexistencia de contratos o procedimiento administrativo, de consignación presupuestaria, y de fiscalización previa o la imposibilidad de comprobación material del gasto.

A este cúmulo de pagos pendientes por 44,7 millones de euros, hay que sumar 21,9 millones de euros incluidos en un plan de pago a proveedores que el Gobierno municipal de Enrique Bolín acordó con ellos en 2004.

Carnero tiene intención de elaborar un plan de saneamiento de las arcas municipales, pero para ello es preciso antes conocer el alcance real de la deuda municipal. Además de aclarar todos estos pagos a proveedores, la deuda financiera que la Cámara de Cuentas estimó a diciembre de 2005 superaba los 74 millones de euros. Por el contrario, no existen deudas con la Seguridad Social ni con Hacienda.

El alcalde lamenta la "nefasta herencia recibida", pero también apela a las necesidades. Proyecta un plan de inversiones de 24 millones para los próximos cuatro años "para el que si no tenemos más remedio nos endeudaremos, pero la ciudad no puede quedarse parada". Entre las acciones más urgentes anuncia la mejora de centros escolares, "que no se han tocado en 12 años".

Los pagos que Bolín comprometió

- Promotores y contratistas han pasado al Ayuntamiento facturas por obras y servicios para el cobro por 10.784.938 euros.

- Hay facturas pendientes por otros 6.393.082 euros, para las que no existe consignación presupuestaria.

- El Ayuntamiento tiene obligaciones reconocidas por las anteriores corporaciones a las que tendrá que hacer frente por 27.594.867 euros.

- Desde hace cuatro años se ejecuta un plan de pago de deuda a proveedores por 21.986.671 euros.

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